La Policía Local de La Rinconada detuvo el pasado miércoles a tres atracadores que robaron en una tienda de telefonía móvil de San José. Sobre las seis y veinte de la tarde, la Policía Local recibió una llamada alertando de un atraco en el comercio.

Al mismo tiempo, un ciudadano avisó a un patrullero que se encontraba cerca del lugar de los hechos y le facilitó la marca y el modelo del vehículo en el que habían huido los delincuentes, según ha informado este viernes el sindicato Sppme en su página web.

La patrulla se encontró con el coche de los ladrones cruzando una calle perpendicular y comenzó una persecución por diversas calles de la localidad. Los atracadores prosiguieron la fuga a toda velocidad, mostrando un gran desprecio por la vida del resto de usuarios de la vida.

A la persecución se fueron sumando patrullas de la Policía Local, que obligaron al conductor del vehículo sospechoso a subirse sobre la acera y acceder a una zona terriza del arcén. Esta maniobra les hizo perder el control y colisionar contra una señal de tráfico, inutilizando el vehículo.

Los tres ocupantes del coche, que había sido sustraído la noche antes en Dos Hermanas, abandonaron el vehículo a la fuga. Uno de ellos llevaba un arma de fuego que llegó a encarar contra los agentes. Los policías tuvieron que realizar hasta cuatro disparos intimidatorios, con el fin de que arrojaran el arma y se tiraran al suelo.

Sólo obedecieron dos de los tres atracadores. El tercero se dio a la fuga a pie, pero tras varios metros fue alcanzado y reducido por el agente que lo perseguía. El policía fue ayudado por un ciudadano que estaba cerca, ya que el ladrón opuso una gran resistencia a su detención. 

Los tres detenidos llevaban guantes, y uno de ellos pasamontañas. La Policía comprobó que en el coche había bolsas de basura de tamaño industrial con numerosos teléfonos móviles y artículos relacionados. Una vez que los detenidos estaban reducidos y engrilletados, la Policía Local dio el aviso a la Guardia Civil, cuyo equipo de Policía Judicial de La Rinconada acudió al lugar de los hechos y a la tienda de telefonía para realizar la investigación del robo.

Los empleados manifestaron que los tres individuos habían entrado con la cara tapada en el local, tirando al suelo una de las hojas de la puerta de entrada, ya que ésta tiene un sistema de seguridad que permite la entrada sólo si se acciona desde dentro. Luego amenazaron a los empleados con armas para sustraer los teléfonos.

Es el tercer robo que sufre esta tienda, lo que ha provocado el temor de los trabajadores. A los delincuentes se les imputan los delitos de robo con violencia e intimidación con uso de arma de fuego, tenencia ilícita de armas, atentado a agentes de la autoridad, conducción temeraria y robo de vehículo a motor.