Una vez que el INE reconozca que el padrón de Alcalá de Guadaíra supera los 75.000 vecinos, el expediente con los argumentos de carácter histórico, cultural, social y económico con los que se debe justificar la condición de Gran Ciudad debe aprobarse en un Pleno municipal monográfico. A partir de ahí, pasará al Parlamento andaluz, que debe ratificarlo en otra sesión plenaria. En el caso de Dos Hermanas se resolvió en menos de un año.

Una vez obtenida esa condición, el Consistorio está teóricamente obligado a hacer cambios organizativos para acercar la administración al vecino, como dividir la ciudad por distritos, con consejos de participación. Alcalá ya tiene esa división, pero la ley prevé que tengan cierto grado de autonomía y un presupuesto limitado. Se debe crear la figura del Consejo Social de la Ciudad o el defensor del ciudadano, pero no siempre se cumple. Dos Hermanas, por ejemplo, no tiene aún los distritos, que la oposición reclama sobre todo para Montequinto. Por otro lado, ser gran ciudad permite tener agentes de movilidad, sin ser policías locales. Fue la razón de fondo de que el Consistorio nazareno diera el paso. Antes de una sentencia del Tribunal Constitucional, de mayo de 2013, ser Gran Ciudad posibilitaba además que el alcalde nombrara delegados municipales sin que fueran concejales electos.

La condición de Gran Ciudad supone también reforzar al gobierno local frente al Pleno en la toma de algunas decisiones para facilitar una actuación "más rápida y eficaz" en algunos aspectos, como adjudicación de contratos, relaciones de puestos de trabajo o proyectos de presupuestos, entre otros.

En lo que respecta a la financiación, se reciben más ingresos por la cesión de parte de algunos impuestos de recaudación estatal imputables al mismo (IRPF, IVA, impuestos especiales sobre bebidas alcohólicas, hidrocarburos o el tabaco). Este diario no ha podido obtener una cifra aproximada de cuánto supondrá eso en Alcalá. En otros casos, se habla de alrededor un 10%. No obstante, algunos cuestionan que compense el resto de cambios que hay que afrontar. El alcalde de Alcalá de Guadaíra insiste en que ninguna de estas razones son el motivo del expediente, lo es el tener mayor peso de interlocución ante otras administraciones.