Sofía Benítez Cubero, la hija natural del ganadero andaluz José Benítez-Cubero Cañete de la Beca, reclamará 12 millones de euros a su hermano y único heredero de la fortuna de más de 20 millones de su padre. El abogado Fernando Osuna, que representa a Sofía, cuya madre sirvió en la casa del ganadero y con el que mantuvo un romance, presentará hoy en los juzgados de Sevilla una demanda exigiendo la parte de la herencia que le corresponde, después de que el Tribunal Supremo confirmase en mayo del año pasado la sentencia de la Audiencia de Sevilla que reconoció que Sofía, que ahora tiene 67 años, nació fruto de la relación entre el rico terrateniente y la sirvienta.

La familia ostenta fincas con una extensión total de unas 2.000 hectáreas, bienes inmuebles, una ganadería famosa por sus toros de rejoneo y una yeguada, entre otros títulos y propiedades.

Hasta la sentencia del Supremo, su hermano era el único heredero de todo el patrimonio familia, mientras que según su abogado, a ella le tocó vivir "una vida humilde, trabajando mucho sin poder ir ni tan siquiera al colegio, salvo unos pocos días".

La localidad de El Coronil, comenta Fernando Osuna, apoya a Sofía, quien ha recibido muchas muestras de apoyo a favor de su pretensión. El contexto de la época en que su madre mantuvo la relación con el ganadero y la familia de éste hicieron que no se casara con su madre, por cuanto eran de distintas familias, "una rica y la otra necesitada, trabajadores agrícolas".

El abogado asegura que el millonario terrateniente tenía una "voluntad firme y decidida de dejar herencia a su hija natural", un hecho que es "conocido" en el pueblo, así como las continuas visitas que hizo a su hija, llegando en ocasiones a portar una cámara para tomar fotografías.