El Betis consiguió una victoria de valor para olvidar de forma rápida aquella semana negra de tres derrotas consecutivas. Y lo hizo recobrando sus señas de identidad, los aspectos del juego implantados por Manuel Pellegrini que en ese bache habían desaparecido y que en el Martínez Valero volvieron a verse sobre la hierba a lo largo de los noventa minutos: intensidad, verticalidad y pegada como principales ingredientes utilizados por los de Heliópolis para regresar a la senda de la victoria.

La puesta en escena del Betis ante el Elche fue muy buena, saliendo a por su rival desde el inicio y aprovechando los graves fallos ilicitanos para dejar el partido más que encarrilado a la media hora de juego con tres goles. El primero, tras un despeje mal orientado de Mojica que aprovechó Álex Moreno para cederle la pelota a Juanmi, quien batió al meta franjiverde con la pierna izquierda. El de Coín fue un incordio constante para la zaga rival en el intercambio de posiciones con Willian José (a la hora de caer a la banda izquierda cuando el dibujo pasaba del 4-2-3-1 al 4-4-2) y provocó un penalti cometido por Barragán que el brasileño transformó de forma magistral. Y el tercer fallo local llegó en el robo de la pelota de Fekir a Bigas en una mala acción del central zurdo de los anfitriones, sacando el galo un zurdazo ante el que nada pudo hacer Édgar Badía.

La puesta en escena bética en Elche fue muy buena, sin acusar que venía de una 'semana negra'

Tres goles en media hora a favor de un Betis que no pasó apuros en el primer tiempo y que con Canales en la manija, con Paul como escudero, siempre tuvo presencia en el campo. De nuevo, a escena un conjunto heliopolitano reconocible que tras el descanso siguió con la misma intensidad y que sólo, ya con diez jugadores por la expulsión de un Bellerín que fue la nota negativa dentro del buen partido verdiblanco en Elche, tuvo alguna complicación, emergiendo entonces la figura de Rui Silva. El meta luso estuvo sensacional en el mano a mano, sin vencerse, ante Lucas Boyé para desviar el disparo del argentino, y posteriormente sacó también un remate de cabeza de Carrillo en otra buena intervención. Fue, de momento, el encuentro en el que el portero portugués ofreció su mejor versión desde que firmara por los heliopolitanos, quienes tras el partido no dudaron en ir a la zona visitante para despedir y agradecer el apoyo a la afición bética presente en las gradas del recinto ilicitano.

Los de Heliópolis sacaron provecho de los fallos graves de los ilicitanos para marcar a base de calidad

Una afición que vio cómo, dentro de esas señas de identidad recuperadas por su equipo, brillaron tres jugadores de carácter ofensivo, ya que Fekir, Willian José y Juanmi estuvieron muy eléctricos. El galo hizo un gol y estuvo a buen nivel, Willian José también marcó y desahogó mucho el juego de su equipo bajando a recibir y Juanmi, con su gol y la pena máxima provocada, dejó claro que atraviesa por un excelente momento como verdiblanco, pues suma ya 7 goles y 2 asistencias en 15 partidos (12 de Liga, con 640 minutos; y 3 de Liga Europa, 120 minutos).

Con diez, el Betis siguió intenso y emergió la figura de Rui Silva para evitar cualquier susto al final

Buenos números unidos también a la aportación del brasileño, con 6 goles y una asistencia en 14 partidos (11 de Liga, 638 minutos; y de Liga Europa, 57 minutos); el francés, con 3 goles y 3 asistencias en 17 partidos (13 de Liga, 119 minutos; y 4 de liga Europa, 312 minutos) y Borja Iglesias, con 5 goles y una asistencia en 16 partidos (12 de Liga, 467 minutos; y 4 de Liga Europa, 303 minutos), lo que refleja el buen hacer de Pellegrini a la hora de exprimir los recursos ofensivos del plantel.

La afición bética hizo acto de presencia en un buen número y su equipo respondió en el campo

A esto se unió ante el Elche una portería a cero para un Betis que llegaba al choque tras encajar nueve en los últimos tres encuentros. Un dato que refleja también la vuelta de ese Betis reconocible con las señas de identidad del Ingeniero.