Derbi con tablas en el marcador y, como siempre sucede en este tipo de partido, sensaciones agridulces y también con diferentes formas de ver el resultado final tanto para Pellegrini como para Sampaoli.

Fekir | En colaboración con el VAR, devolvió a la vida al Sevilla

Fekir se deja atrás un balón ante Rekik.

Sánchez Martínez había tenido que acudir al monitor del VAR tras la recomendación de González González para mostrarle la tarjeta roja a Montiel y eso quería decir que en cualquier circunstancia parecida se vería obligado a tomar idéntico camino. Y no tardó en suceder una de ellas. En la prolongación del primer periodo sacó los dos brazos a pasear en una acción con el argentino Papu Gómez, que se quejó sobre el césped del golpe y también mostró una pequeña herida. Otra vez González González invitó a Sánchez Martínez a irse al monitor y las imágenes reflejaban que los brazos del francés golpean el bajito Papu Gómez, porque la altura también influye en ese sentido. Expulsión y a Fekir se lo llevaban los diablos en su rabia por la roja, pero es que cometió un error de principiante cuando estaba cuesta abajo para los suyos con vistas a una segunda mitad muy a su favor. Hasta ahí había jugado bien, había colaborado en el gol de los suyos, pero le sobró esa utilización de las extremidades superiores para protegerse.

Gudelj | Segundo zambombazo del curso a la red de los rivales y después pudo decidir

Gudelj dispara en el gol del empate sevillista.

El serbio está cogiendo confianza en su golpeo desde fuera del área, algo que escasamente había mostrado hasta la presente temporada. Después del golazo a su compatriota Rajkovic en Palma de Mallorca, volvió a atreverse con Claudio Bravo y éste no pudo hacer absolutamente nada. Después tuvo dos claras para el 2-1.

Édgar | Oportuno todas las veces que los sevillistas llegaron

Édgar se abraza con Pezzella al final del partido.

Estuvo muy acertado el gigante catalán a la hora de rescatar a Claudio Bravo en varios acercamientos sevillistas con mucho peligro e incluso fue considerado como el mejor jugador del partido con posterioridad por la prensa de fuera. Le salvó una Rafa Mir, otra a Lamela y un centro de Rakitic, que llegó casi a la línea de fondo.

Bono | Primero, manos blandas; después clave ante Borja Iglesias y Álex Moreno

Bono no puede detener el balón rebotado en Jesús Navas.

Se le puede achacar que pudo hacer algo más en la jugada del 1-0. Es verdad que el rebote en Jesús Navas sorprendió a todos, pero el canadiense llega al balón y pone la mano floja a la hora de tratar de impedir el gol. Pero después salvó a los suyos con una gran parada a Borja Iglesias con el pie y otra a Álex Moreno.