Se ha cansado Nabil Fekir de decir que en Sevilla está contento, que es feliz en el Betis, instalado en la constelación de estrellas de una Liga que lo felicitó por su 29 cumpleaños con un vídeo con algunos de sus goles y un escueto mensaje: "Nabil Felir es un regalo para el fútbol. ¡Feliz cumpleaños mago!

🎁 ¡@NabilFekir es 𝙪𝙣 𝙧𝙚𝙜𝙖𝙡𝙤 𝙥𝙖𝙧𝙖 𝙚𝙡 𝙛𝙪́𝙩𝙗𝙤𝙡!¡Feliz cumpleaños, mago! 💚🎂🤍#LaLigaSantander pic.twitter.com/17TkdNRCPE

— LaLiga (@LaLiga) July 18, 2022

El francés renovó hace unos meses con el conjunto verdiblanco hasta 2026, pero es consciente que en el fútbol nada es para siempre. Es un negocio, hay un mercado y los clubes son empresas que deben cuadrar cuentas y los futbolistas tienen que hacer caja en una carrera profesional que cada vez, por la exigencias físicas, se acorta más.

Es por ello que resulta normal, si a todo lo anterior se suma la enorme calidad del galo, que su nombre esté en el escaparate. De momento, se mira, pero nadie lo compra. Pregunta por él, por su precio, cómo pagarlo, pero de momento Fekir sólo piensa en verdiblanco.

En un mercado nacional en el que sólo las palancas han propiciado grandes movimientos, los clubes esperan movimientos para cuadrar números y cumplir el famoso límite salarial. Unos obligados a ello más que otros, según parece. El caso es que el Betis necesita vender y, más allá de William Carvalho, el runrún de una venta inesperada con la que hacer caja lleva desde antes del verano planeando por el Benito Villamarín. Según Goal el Milan y la Roma se interesaron por Fekir, pero desde Italia se apunta que el equipo de José Mourinho se hará con los servicios de Paulo Dybala, libre de la Juventus, y el campeón italiano avanza en la contratación del belga de 21 años Charles De Ketelaere. 

La necesidad heliopolitana por vender existe. Necesita resolverlos problemas financieros y de límite salarial, pero no a cualquier precio. Cabe recordar que Fekir se reservó para él un 10% de un traspaso y que el Olympique de Lyon tiene otro 20%. El citado medio llegó hablar de una tasación de 35 millones, de los el Betis, con esos porcentajes, ingresaría menos de 25. Es por ello que el Betis, pese a poner en el mercado al francés, elevaría su precio de venta, ya que está lejos de las cifras de traspasos de grandes estrellas que se está viendo en Europa.

No tiene, por ejemplo, el Betis la necesidad que sí tiene el Olympique de Lyon con Aouar. El francés cumple contrato en 2023 y es ahora o nunca. Venta, aun por menos de lo que le ofrecía el Arsenal hace un par de años (se habló de cifras cercanas a los 50 millones) o se irá gratis el verano próximo. El cuadro galo, además, fuera de competiciones europeas esta temporada, necesita liberar masa salarial, ya que no contará con los ingresos extras de la UEFA.