Vuelve Isco, Antony se pierde el derbi y otro empate tras parón (1-1)

1-1, reparto de puntos en la Cartuja, donde volvió Isco, pero el Betis perderá a Antony para el derbi por una polémica expulsión, VAR mediante, en un intento de chilena en la que acabó golpeando a Joel Roca. Al que no vio en ningún momento. Pero Iosu Galech, el mismo que se inventó aquel penalti en contra en Cornellà con el tiempo cumplido, acudió a la llamada de Pulido Santana, que le puso la imagen bien paradita del instante en el que Antony intenta a rematar impactando en Joel Roca, al que no ve porque en todo momento está mirando arriba, al balón.

Todo ocurrió con el Betis volcado, después de que Valentín Gómez lograra empatar en un córner al entrar con fe para cabecear a la red un saque de esquina botado por Isco, que había redebutado poco después tras más de tres meses de baja.

Pero fue un Betis de chispazos, sin continuidad en su juego ante un buen Girona en el que Gazzaniga apenas tuvo que intervenir con exigencia.

El encuentro comenzó después del festivo anuncio de la renovación de Isco el encuentro arrancó con un primer aviso visitante, con Álex Moreno llegando a línea de fondo y poniendo el pase al área para que Tsygankov rematara en el borde del área chica, pero Valentín Gómez salvó lanzándose al suelo. Respondió el Betis con Antony disparando alto, pero tras el movido inicio el encuentro entró en una dinámica en la que el Girona tenía más el balón, con los verdiblancos esperando para robar y salir a la contra.

Pero darle la posesión al rival es un riesgo y con Bellerín sobrepasado en la derecha una triaungulación en el área entre Bryan Gil y Ounahi acabó con el barbateño poniendo el pase de la muerte para que Vanat sólo tuviera que empujar a placer sin oposición, con todos los defensas sobrepasados.

Trató de reaccionar el Betis, pero los ¡uys! fueron pocos. Un disparo desviado de Cucho Hernández, un pase de Antony que Arnau despejó a córner cuando el colombiano se disponía a rematar y los remates blanditos de Lo Celso a las manos de un Gazzaniga que no se vio nunca exigido de verdad, por lo que la afición bética, tras un mano a mano que Álvaro Valles le sacó a Vanat, despidió a los suyos camino de los vestuarios con una tímida pitada.

Reaccionaron los verdiblancos con los cambios, con la entrada Ruibal, Abde y Amrabat y después la vuelta de Isco, que empezó a canalizar el juego de su equipo. Puso la asistencia a la cabeza de Valentín Gómez, remató un par de veces, pero le falta el lógico ritmo. Poco a poco, ahora que tiene contrato hasta 2028 tras su renovación.