Uno de los puntos clave en el orden del día de cara a la junta de accionistas del Betis del próximo viernes es el referente al examen y aprobación de las cuentas anuales correspondiente al ejercicio anual cerrado a 30 de junio de 2016, y en este sentido son muchas las dudas que existen en el accionista bético con respecto a unos números que no invitan al optimismo.

En primer lugar, cabe resaltar que la deuda total del Betis a 30 de junio de 2016 asciende ya a 46.390.213 euros, cantidad que incluye la deuda del concurso (deuda heredada), que son 10.414.219 (largo plazo) y 2.367.857 (corto plazo), por lo que la deuda de la gestión generada por los últimos consejos (deuda sin contar la del concurso o heredada) en el ejercicio 15-16 asciende a 33.608.137. En concreto, el actual consejo, en el ejercicio que se somete a aprobación, ha aumentado esta deuda en 17 millones de euros más con respecto al ejercicio de la pasada temporada. De esa deuda de gestión (33.608.137), solamente 3.528.386 son a pagar a largo plazo (+ de un año); el resto, 30.079.751 es a corto plazo (máximo 12 meses). Cabe resaltar como dato, que esta deuda a corto plazo, a pagar durante el ejercicio 2016-2017, supone prácticamente el 50 % de los ingresos estimados para la temporada venidera, aunque se cuentan con activos corrientes por importe de algo más de 12 millones, insuficientes toda vez que el fondo de maniobra (capacidad para hacer frente a las deudas a corto plazo), como se indica en la página 8 de la memoria, asciende a un valor negativo de más de 20 millones, lo cual a la vista del presupuesto presentado, las inversiones realizadas en el ejercicio iniciado y las propuestas a futuro, hacen presagiar que el endeudamiento siga ascendiendo al cierre del próximo ejercicio.

Dentro de la de deuda de gestión a corto plazo hay un apartado que resulta cuanto menos llamativo en las cuentas del balance a presentar en la junta, las periodificaciones, compuestas en su totalidad por ingresos anticipados (recursos consumidos del ejercicio siguiente, abonos, marketing…), que ascienden a la cantidad de 3.150.268, aunque también se han adelantado gastos por importe de 931.410, por lo que el montante de los recursos consumidos del ejercicio venidero asciende a 2.218.858, cifra clave para comprender el disponible (dinero que el Betis tiene en el banco teniendo en cuenta la tesorería y las inversiones financieras a corto plazo). Así, el disponible del club de Heliópolis asciende a cierre de balance a 915.577 (804.771 en efectivo y 110.806 en inversión financiera a corto plazo) y si a esto restáramos los recursos anticipados arriba detallados (2.218.858) el disponible tendría un saldo negativo de -1.303.281. De este modo, el Betis, de no haber tenido ingresos anticipados habría necesitado más financiación externa al tener saldo negativo.

Además, se sigue insistiendo mucho en la cifra de 90 millones de euros como la deuda concursal del Betis, pero la realidad y los datos, como se recoge en la Memoria del Balance de Situación del Betis a 30 de junio de 2012, es decir, del ejercicio 11-12 una vez realizado el informe pertinente los administradores concursales, establece la deuda concursal (página 43) en 76.682.364, 80 euros. A esa cifra, como se recoge a continuación en dicha memoria (también en la página 43), hay que restarle la quita (50 % del importe de los créditos ordinarios y subordinados, así como de los créditos privilegiados), es decir, 21.249.086, y también la cantidad de 15.694.261, que corresponde al pleito ganado por el Betis a Hacienda y que se recoge en la página 45 de la Memoria de 2014. Así, la deuda concursal (deuda heredada) asciende a la cantidad total de 39.739.017.

Por tanto, el desembolso que el Betis lleva realizado para pagar la deuda concursal es de 26.956.942, cantidad que resulta de restarle a la deuda concursal heredada (39.739.017) los 12.782.076 (10.414.219 a largo plazo y 2.367.857 a corto plazo) que a 30 de junio de 2016 la entidad verdiblanca aún tiene que pagar. No obstante, el dato que causa más preocupación es que la deuda de gestión actual (sin contar los 12.782.076 de deuda heredada) citada anteriormente (33.608.137) está muy cerca del alcanzar a la deuda concursal heredada (39.739.017).