EL TIEMPO
Fin de semana de frío con mínimas de hasta -5ºC y lluvias

Boticaria García, farmacéutica, explica por qué los huevos en el supermercado están en los estantes: "Pueden ser la puerta de entrada de bacterias"

Cómo conservar los huevos

No se deben ubicar los huevos en la puerta de la nevera porque están sometidos a un cambio constante de temperatura

Un estudio demuestra que los huevos fritos bajan el colesterol

Una persona sostiene un huevo

El huevo es un alimento que genera controversia, sobre todo, donde almacenarlo. Básicamente, porque en el supermercado se encuentra en el estante y en casa se tiene que guardar dentro de la nevera. La respuesta está relacionada con la seguridad alimentaria, la normativa de la Unión Europea y las características biológicas. La farmacéutica Boticaria García advierte sobre los riesgos posibles de salud que pueden aparecer si no se conservan en el lugar perfecto: "El huevo está expuesto a las bacterias porque aunque la cáscara sea protectora, esta no es impermeable y cuenta con muchos poros". Además, sudan y, por eso, es tan importante mantenerlo a la misma temperatura siempre.

TIK-TOK

La cáscara del huevo es muy fina y recibe el nombre de cutícula y actúa como barrera frente a las bacterias, sobre todo, la Salmonella. Igualmente, como se ha comentado más arriba, esta no es perfecta y puede romperse, agrietarse o perder la protección con el lavado, la manipulación excesiva o cambios bruscos de temperatura. Esa es la principal respuesta de por qué se guardan a temperatura ambiente en el supermercado porque así se evita la condensación, sobre todo, si están almacenados en la nevera y después se lleva hasta la casa rompiendo la cadena del frío.

Por qué se guardan en la nevera en casa

Los huevos se almacenan en el frigorífico en casa porque en la cocina pueden sufrir cambios de temperatura, mientras que en la nevera es más estable. Además, así tendrían más tiempo de conservación, ya que pueden estar de tres a cinco semanas después de comprarlos. El frío también ralentiza el crecimiento de las bacterias y aporta mayor estabilidad tanto a la clara como la yema. Otro gran dilema que surge es dónde colocarlos. Aunque es muy común usar las hueveras en la puerta, ese no es realmente su sitio. Esta está sometida a muchos cambios de temperatura al abrir y cerrar constantemente. Sin duda, esto favorece la condensación y el riesgo de contaminación.

El mejor sitio para almacenarnos es el estante central, dentro de su envase original de cartón para protegerlo de golpes y olores de otros alimentos. La punta de este tiene que estar hacia abajo porque ayuda a la yema a que se mantenga centrada. Estos no se pueden lavar antes de guardarlos porque el agua elimina la cutícula. En el caso de que estén sucios, lo aconsejable es limpiarlos antes de utilizarlos para ser consumidos.

Referencias bibliográficas:

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último