Diez beneficios de consumir miel en tu dieta

A la hora de incorporar un alimento saludable en nuestras dietas la miel es una de las mejores elecciones. Uno de los productos favoritos por los nutricionistas, es altamente valorado por sus propiedades y beneficios en nuestro organismo. Usado como endulzante y sustitutivo de azúcares también es un buen complemento para aromatizar e incluso elaborar platos con este ingrediente como base.

Alto contenido en proteínas

La miel está formada en su mayoría por enzimas y aminoácidos, los cuales son la base de la producción de proteínas, generadas por las propias abejas. Las proteínas son esenciales en cualquier tipo de dieta dadas sus capacidades para el crecimiento de los tejidos de forma natural.

Estimulante de la memoria

Tomar miel de manera diaria ayuda a trabajar a nuestro cerebro, fortaleciendo la memoria a corto plazo y aumentando los niveles de azúcares saludables en sangre, lo que contribuye a mejorar la concentración.

Hidratación natural

En numerosas ocasiones la miel es un producto utilizado como hidratante capilar debido a su alta concentración en humedad. Además consigue hidratar la piel de manera eficaz, sirviendo de hidratante natural, actuando como rejuvenecedor y acondicionador.

Ayuda al estrés metabólico

Nuestro hígado se ve favorecido por la ingesta de miel debido a que lo ayuda a su producción de glucógeno. Por eso es recomendable su consumo en cualquier momento del día, ya que dota a nuestro organismo de reservas de energía de glucógeno que evitarán la liberación de hormonas del estrés.

Endulzante natural

La miel de abeja es el sustituto ideal para el azúcar en nuestras comidas. Si lo que buscamos es una fuente natural de endulzante las abejas producen el producto perfecto, compuesta por flavonoides y enzimas potencia además las capacidades nutricionales de los alimentos a los que acompaña.

Además, regula la cantidad de azúcar en la sangre ayudando a eliminar de nuestra circulación la glucosa.

Alto contenido de antioxidantes

El consumo diario de miel de abeja, gracias a su poder antioxidante, ayuda a la prevención de enfermedades cardíacas y del sistema inmune. Los antioxidantes son las sustancias que consiguen frenar la descomposición celular. Además, gracias a sus propiedades antiinflamatorias tiene la posibilidad de reducir hinchazones musculares.

Regula los procesos hormonales

La causa la encontramos en cómo la miel sirve de estímulo para la producción de ácido omega-6, el cual es el encargado de la regulación de todos los procesos hormonales en nuestro cuerpo.

Poder diurético

La miel ayuda a reducir el colesterol evitando que la grasa se acumule en nuestro organismo, por lo que combinado con otros alimentos es el complemento ideal para conseguir bajar de peso.

Potenciador de la digestión

Si hay un producto que favorece la actividad de nuestro sistema digestivo ese es la miel. Además de su ayuda en el metabolismo también actúa como un elemento preventivo de las indigestiones. También es un excelente remedio para la diarrea y los estreñimientos.

Ayuda a conciliar el sueño

El alto contenido en azúcar natural de la miel expulsa la insulina que permite que se desarrolle la hormona que regula el sueño: la melatonina. Lo ideal es tomarla justo antes de ir a dormir para notar los efectos reparadores de la miel en nuestro descanso diario.