Durante el verano es común 'alterar' nuestros horarios, tanto los de sueño como los de las comidas, algo que en ocasiones va unido. Al estar de vacaciones no nos solemos levantar de la cama tan pronto como cuando trabajamos, lo que provoca que el desayuno se tome más tarde y, por lo tanto, también se retrasen el resto de comidas del día.

En este sentido, el nutricionista Pablo Ojeda comentó en el programa que se emite en laSexta, Más Vale Tarde, las horas en las que deben realizarse las cinco comidas del día. Además, el experto habló sobre algo habitual que también ocurre en los meses de julio y agosto: aumentar nuestro peso. "Tenemos una serie de células que son como un cuenco. Hay épocas en los que se pesa mucho más que otras. Si hemos venido del verano, las células vienen con alegría. Lo lógico es que se pese más, pero eso no es malo", explicaba el nutricionista, como recoge El HuffPost.

El experto también daba las claves para hacer frente a la retención de líquidos que, como él contaba, viene provocada por la subida de temperaturas. Aunque pueda sonar contradictorio, Pablo Ojeda aconsejaba "mantenerse hidratado", además de tomar un vaso de zumo de limón, que asimismo, también ayudará a limpiar nuestro cuerpo.

Pablo Ojeda también recomendó unas recetas, que destacan tanto por la velocidad con la que se llevan a cabo como por sus propiedades nutritivas. Estas son carpaccio de gambones y una crema de zanahoria y mango. También aconsejó que cuando se vaya al supermercado se esté "saciado" y "tranquilo", además de acudir a él "con una lista de la compra".

Estas son las horas a las que debes realizar las cinco comidas

Sobre las horas a las que debemos realizar nuestras comidas, Pablo Ojeda señaló que el desayuno debe ser antes de las 9:00, mientras que el almuerzo principal antes de las 14:00. En referencia a la última comida del día, el experto indicaba que no se debería tomar después de las 21:00.

La comida 'de media mañana' recomendaba que fuera a las 12:00 horas, mientras que la merienda sobre las 18:30, indicaba el nutricionista en el espacio de laSexta, donde añadió que estas horas "no son obligatorias".

Otras voces indican que la hora de la cena también debe depender del momento en el que vamos a acostarnos, pues este debe ocurrir unas dos o tres horas después de la última comida del día. Un estudio de la Universidad de Harvard, por su parte, determinó que para activar el metabolismo, lo idóneo es cenar 6 horas antes de irnos a dormir.