El Ayuntamiento impedirá que se vendan avíos para la 'botellona'
La medida, igual que a la hostelería, afectará a los establecimientos situados en 49 calles
Una medida para evitar que se consuma alcohol de manera indiscriminada en la calle. La resolución emitida por el Ayuntamiento para regular determinadas actividades comerciales y de hostelería durante la Semana Santa trata de solucionar una carencia detectada el año pasado que afecta, fundamentalmente, a las tiendas de conveniencia. El Consistorio quiere acabar con las botellonas que se realizan por parte de algunos jóvenes en calles o zonas por las que transitan directamente las cofradías y que deparan estampas poco edificantes, además de generar problemas de seguridad. Igual que los locales de hostelería no pueden vender bebidas para su consumo en la vía pública, estas tiendas tampoco podrán hacerlo desde una hora antes del paso de las cofradías y hasta su finalización.
La restricción, como en el caso de los bares, se circunscribe a seis sectores del centro que comprende un total de 49 calles, entre las que se encuentran la Alfalfa, Arfe, Argote de Molina, Mateos Gago, Reyes Católicos, San Pablo, la Encarnación, Regina, Orfila, Alfonso XII, la Puerta de Jerez, Méndez Núñez o la Plaza Nueva.
El punto a de la resolución dice concretamente que "no podrá expedirse bebidas susceptibles de ser consumidas en la vía pública, en cualquier tipo de envase (vidrio, latas, plástico y similares), ni hielo, por los establecimientos con acceso directo por las calles que se indican, cuando por las mismas discurran desfiles procesionales, desde una hora antes de la llegada de la cruz de guía a la altura del establecimiento hasta la finalización del paso de la cofradía". En virtud de ello, la Policía Local podrá actuar contra aquellos establecimientos que vendan avíos para la botellona.
La resolución, que ha generado cierta controversia entre los comerciantes afectados, busca, según aclararon este miércoles desde el Ayuntamiento a este periódico, acabar exclusivamente con las botellonas. El año pasado, la Policía Local tenía muy identificados a los establecimientos que suministraban bebidas a los jóvenes para consumir en lugares muy concretos, como Reyes Católicos o el Salvador, por donde pasan las cofradías. Las fuentes municipales consultadas quisieron dejar claro que en ningún momento se va a impedir que se vendan, por ejemplo, botellas de agua o similares, pero que era necesario contar con esta herramienta para ir al foco del problema e impedir que pueda vender alcohol. También recordaron que los bares y restaurantes no pueden dispensar bebidas para consumir en la calle, a menos que cuenten con una terraza de veladores, que en las zonas sensibles también tiene que ser retirada una hora antes de la llegada de los cortejos. Esta medida no es nueva y se aplica desde hace una década.
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