contrapunto

La estela venezolana de Nuestra Señora del Socorro

  • domingo de ramos. Karen Mendoza y Víctor Caldera juraron como hermanos del Amor y harán en 2024 su primera estación de penitencia

Karen Mendoza y Víctor Caldera, en la plaza del Salvador, junto a la estatua de Martínez Montañés.

Karen Mendoza y Víctor Caldera, en la plaza del Salvador, junto a la estatua de Martínez Montañés. / .

Karen Mendoza y Víctor Caldera son venezolanos de Valencia, capital del Estado de Carabobo. El segundo día de quinario juraron como hermanos de la hermandad del Amor y en la Semana Santa de 2024 esperan estrenarse con la túnica de nazarenos de esta cofradía que desde 1922 hace la estación de penitencia a la Catedral desde la iglesia del Salvador.

Es una historia de Amor con mayúsculas. Karen Mendoza (Valencia, Venezuela, 1984) fue la primera en descubrir la ciudad. Dicen los biógrafos del arquitecto Aníbal González que le propusieron diseñar la Gran Caracas, proyecto que no llegó a realizar. Karen, periodista y abogada, sí consumó su proyecto de la Gran Sevilla.

La primera visita fue con ocasión de la Jornada Mundial de la Juventud de 2011. "Antes de ir al encuentro de Madrid, había plaza en dos sitios, Sevilla y Cuenca. Nunca había estado en España y elegí Sevilla". No conoce Cuenca, muy recomendable por su festival de música religiosa cada Semana Santa. Con dos mexicanas se acogió a la hospitalidad de una señora de Triana. "No sé si vivirá porque tenía más de noventa años". La segunda visita tuvo lugar un año después. Venía con el cura de su parroquia de Valencia, Santa Inés Mártir, para visitar en Morón el estudio del imaginero al que le habían encargado las nuevas imágenes de los titulares de su iglesia, una Dolorosa y un Crucificado.

Ese segundo viaje Karen lo hizo acompañada de Víctor Caldera (Valencia, Venezuela, 1984), informático, su marido desde que se casaron el 19 de diciembre de 2009 en Santa Inés Mártir. Además de viajar a Morón, aprovecharon para hacer el camino de Santiago. "Fuimos por el camino francés".

Estaban predestinados para ser hermanos del Amor. "Llegamos a Sevilla definitivamente el día de san Valentín de 2018", dice Karen. "En las aerolíneas venezolanas nos dijeron que el vuelo no se había llenado porque salía un martes 13. Nos da suerte esa cifra. Nuestro primer Miércoles de Ceniza lo vivimos en Sanlúcar la Mayor, un día después del martes y 13 de Carnaval".

Forman parte de los siete millones de venezolanos que viven fuera de su país. "Las cifras de la diáspora nunca se conocen porque sería un fracaso para el Gobierno. Sólo en Colombia residen dos millones de venezolanos. Se ha ido más gente que de Siria o de Ucrania, pero es una guerra silenciosa". La de Karen es una familia que se exilió al completo. Su hermano varón vive en Medellín (Colombia). Una hermana está en Santiago de Chile y otra vive con ella en Sevilla.

En Venezuela no hay nazarenos ni procesiones. Se vive la Semana Santa de otra manera. "En Valencia, nuestra ciudad, hay mucho arraigo religioso". El día fuerte es el Martes Santo. "Tiene lugar un encuentro multitudinario de jóvenes en un estadio de béisbol, el José Bernardo Pérez". El Miércoles Santo sale el Nazareno.

La hermandad del Amor es fruto de la fusión de la Sagrada Entrada en Jerusalén, fundada en el hospital del gremio de los medidores de la Alhóndiga, y la del Amor de Cristo, que se funda en la iglesia de Santiago para visitar y socorrer a los presos. A Karen, mujer de fe, que trabaja en la delegación diocesana de Comunicación, le emociona saber que por la histórica vinculación de 23 conventos femeninos de Sevilla se hicieron hermanas 515 religiosas de clausura.

El nombre completo era Amor de Cristo, Madre de Dios del Socorro y Gran Patrón Santiago. Cuando Karen conoció la segunda de las advocaciones, le entró un estremecimiento espiritual. "Nuestra Señora del Socorro es la patrona de mi Valencia natal. Es la primera Virgen coronada canónicamente en Venezuela, la coronó en 1910 Pío X. Su fecha es el 13 de noviembre, ése día la llevan en procesión hasta la plaza de toros de Valencia".

Uno de los símbolos de la hermandad del Amor, cuyos titulares son obra de Juan de Mesa, es el pelícano. El símbolo de la generosidad, el animal que se sacrificaba por sus hijos. "Yo daba clase de Medios de Comunicación a los alumnos de segundo curso de Teología en el Seminario Metropolitano de Valencia. Todos los días me detenía ante el cuadro con el pelícano y rezaba la oración de Tomás de Aquino; lo he vuelto a encontrar en la iglesia del Salvador".

Karen Mendoza es de la cofradía del Socorro de Valencia. "Se entra por invitación, a mí me invitó por mi labor periodística el arzobispo Monseñor Reinaldo de Prette, un pastor que visitó Sevilla varias veces y murió hace cuatro meses". Víctor Caldera atribuye a la Virgen del Socorro la capacidad de hacer honor a su nombre para socorrerle en momentos "de inquietudes, de agobios, de incertidumbres".

Esta pareja de venezolanos está deseando estrenarse como hermanos del Amor por las calles de Sevilla. La Semana Santa se la descubrió "callejeando" el padre Adrián Ríos, párroco de la iglesia San Juan Pablo II a la que pertenecen. Hacemos las fotos en la plaza del Salvador, junto a la estatua de Martínez Montañés. Saludan a un sacerdote. "Es el padre Nelson, también venezolano". En su primera visita a Sevilla, paseando por el callejón de la Inquisición, Karen pidió un deseo, "que Dios me diera salud para venirme a esta ciudad con mi marido". Se cumplió un día de los Enamorados y ya son hermanos del Amor. Sólo les queda un Domingo de Ramos. La Borriquita ya ha entrado en Jerusalén.

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