Nada descubrimos acerca de la riqueza y variedad de las cofradías del Jueves Santo. Cada una aporta su sello y su personalidad, y todas son imprescindibles para conocer el desarrollo temporal e histórico de la Semana Santa. Puro clasicismo en Los Negritos o la Exaltación, la realeza de la Victoria, el barroco de la Quinta Angustia, la perfección de Pasión, la belleza el Valle... Pero, de manera indudable, la nota más popular de la jornada la aporta la cofradía de Montesión, que desde la Plaza de los Carros resuelve casi medio milenio de historia en sus dos portentosos pasos. 

La Agrupación Musical de la Redención, que acompaña cada Jueves Santo al misterio de la Oración, ha compartido recientemente un vídeo en sus redes sociales donde se puede observar una chicotá memorable que protagonizó este paso el pasado 6 de abril. Plena Carrera Oficial. Tras abandonar la Plaza de San Francisco, el paso de misterio de la Oración se levanta justo en la confluencia con el Banco de España y la Plaza Nueva. Quizás los cofrades abonados lo desconocían, pero estaban a punto de presenciar un instante de lo más impactante: una chicotá de las que levantan ovaciones y no se olvidan. 

Desde ese lugar hasta los mármoles catedralicios, una única chicotá de diecinueve minutos que le valió al misterio para ganarle metros a la cofradía y resolver, de una sola vez, el trayecto por esta Avenida. Entretanto, la Redención interpretó hasta cinco marchas procesionales continuadas, sin descanso e interrupciones: Concepción (nativa de la Sentencia de Jerez y dedicada a la cofradía de la Exaltación), Blanca Paloma, Alma de Dios (clásico donde los haya), Redención (emblema de la formación) y Padre, una de las más reconocidas de esta agrupación musical. 

Mezclando cambios y andares firmes, la cuadrilla del Señor de la Oración dio buena muestra de lo que a veces nos parece imposible: que se puede andar sin perder un estilo y siendo fiel a unas características que nacen y surgen de lo más profundo. Para visualizarla una y otra vez.