La próxima Madrugada no habrá invitados en el atrio de la basílica para ver la salida de la Macarena. La junta de gobierno que preside José Antonio Fernández Cabrero ha decidido eliminar la zona que se acotaba para estas personas que no participaban en la estación de penitencia y utilizar toda la explanada para organizar la cofradía. 

Se trata de una de las principales novedades que se han dado a conocer este miércoles de cara a la inminente salida. Con ello se persigue que los nazarenos cuenten con un espacio más amplio y no sufran las apreturas propias en las horas previas a que el cortejo penitencial se ponga en la calle. 

Otra de las novedades de este año consiste en el código QR que incorpora la papeleta de sitio, un dispositivo que agilizará la entrada de los hermanos a la Basílica y San Gil, así como la entrega de cirios, varas e insignias por parte de los diputados de tramo y enlaces. 

Por otro lado, se mantiene el tramo infantil creado el año pasado, que se organizará en el atrio. Los hermanos más pequeños cuentan con vigilancia y seguridad especial y están atendidos por diputados formados para tal fin, a lo que se suma un dispositivo específico de atención médica. 

Lo que sí se mantendrá en el atrio será una zona acotada para uso exclusivo de los medios de comunicación, una ocupación que, según la hermandad, "no afectará a la fluidez en la salida de la cofradía". 

El Señor de la Sentencia, antes de abandonar la basílica, entre plumas de armaos.

En este punto, la hermandad ha anunciado que ha cerrado con una cadena la retransmisión televisiva de la salida y entrada de la cofradía, una cobertura que durará ocho horas y que está pensada para los hermanos y devotos que no pueden trasladarse esa noche a la basílica.

Los últimos tramos de la Virgen -los hermanos de mayor antigüedad y por tanto de más avanzada edad- contarán con un espacio reservado en la reformada casa de hermandad. 

Por otro lado, se habilitarán nuevos accesos en la Plaza de San Gil y se pondrán a disposición de los nazarenos más servicios químicos (WC) y de fuentes para beber en la basílica. 

Una vez fuera de la Catedral, quienes participen en la estación de penitencia contarán con varios lugares para ir al aseo con comodidad, sin que esto afecte al buen discurrir de la cofradía.