Un equipamiento de última tecnología para evitar cortes de luz totalmente inutilizado. El renovado centro de transformación que Endesa había instalado hace apenas un mes en Torreblanca ha ardido por completo, quedando inutilizado. Se trataba de una instalación muy puntera que buscaba solucionar los problemas en este barrio que en muchos casos se achacan a los enganches ilegales a la red.

Endesa, a través de su filial de redes e-distribución, había instalado la última tecnología en el centro de transformación ubicado en la plaza Salvador Valverde, una nueva medida instaurada en esta zona donde se registra una sobrecarga de la red derivada de las manipulaciones de las instalaciones eléctrica para su uso fraudulento. 

Así ha quedado el centro de transformación.

La compañía, acompañada de un dispositivo de Policía Nacional por seguridad de los trabajadores, instaló a finales de junio dos nuevos cuadros de baja tensión telemandados en este centro de transformación, sustituyendo los cuatro que se estaban utilizando hasta ahora y que eran de control manual.

La compañía señalaba entonces que esta nueva tecnología permitía el control remoto de la propia instalación, por lo que ante cualquier sobrecarga de la red, los fusibles del cuadro de baja tensión saltan por seguridad y se pueden volver a activar de forma remota, reduciendo de este modo el tiempo de reparación del suministro y garantizando la seguridad de los trabajadores de Endesa.

Trabajos de instalación hace apenas un mes.

Esta nueva tecnología supuso una inversión de unos 35.000 euros y era la segunda vez que se instala en estas zonas afectadas por el fraude masivo, el primero se colocó en un centro de transformación en Padre Pío. La compañía tiene previsto seguir desplegando esta metodología por otros centros de transformación de las zonas más afectadas por sobrecarga de la red.

Estas medidas para hacer frente a la problemática de la sobrecarga de la red, han ido acompañadas de la instalación de tres nuevos centros de transformación en Torreblanca en las calles Nogal, Marinaleda y los Molares que dan servicio a unos 5.600 clientes. Además, se han reformado dos centros de transformación afectados por las incidencias que provocan los enganches ilegales que acaban saturando las redes de distribución.

Además, en este distrito sevillano en 2022 se llevaron a cabo 30 obras, en las que se reforzaron cerca de 25 kilómetros de circuito de media y baja tensión y se instalaron 5 nuevos centros de transformación, mejorado otros 4 de esta zona. Este plan de refuerzo que se ha llevado a cabo en los últimos dos años ha supuesto un aumento la capacidad de las redes en un 60%.