DERBI Betis y Sevilla ya velan armas para el derbi

Calle Rioja

Una ‘Bienal’ para recordar a una ‘reina’

  • Duende. La Peña Flamenca Torres Macarena organiza del 20 al 24 de este mes un festival para homenajear a la Niña de los Peines en el cincuentenario de la muerte de la cantaora

Jerónimo Roldán, presidente de la Peña (derecha) y Miguel Camacho, junto a la estatua de la Niña de los Peines en la Peña Torres Macarena.

Jerónimo Roldán, presidente de la Peña (derecha) y Miguel Camacho, junto a la estatua de la Niña de los Peines en la Peña Torres Macarena. / Juan Carlos Muñoz

ESTOS callejones en torno a la Plaza Centuria Macarena rebosan de flamenco. Un laberinto formado por las calles Adelantado, Monederos, Jaira, Carranza y Torrijiano. En esta última nacía Pepe Pinto (1903-1969), a quien su pareja, Pastora Pavón, la Niña de los Peines (1890-1969), le sobrevivió veinte días. El 26 de noviembre se cumplen 50 años de su muerte. En la misma calle Torrijiano, la Tertulia Flamenca Torres Macarena va a organizar la II Segunda Semana Cultural Pastora Pavón entre los días 20 y 24. El último domingo de noviembre se hará una ofrenda floral ante la estatua de la Alameda, escoltada por Caracol y Chicuelo.

La Peña Flamenca Torres Macarena ha tirado la casa por la ventana. “Otras peñas dicen que nos ha salido una mini-Bienal de Flamenco”, dice Miguel Camacho, vicepresidente de la peña. En el cartel, artistas como Pastora Galván, Antonio Reyes, Pepe Torres o Rancapino Chico. Habrá charlas del profesor José Cenizo, el crítico flamenco Manuel Martín y con Rocío Albéniz, familia del matrimonio.

La Peña Torres Macarena, con 130 socios “y treinta en lista de espera”, dedicó ocho mil euros al festival “viendo que ninguna institución cogía la antorcha decidimos hacer algo grande por nuestra cuenta”, dice Jerónimo Roldán, presidente de la peña.

Roldán tenía quince años cuando murió Pastora Pavón. “Mi abuela, Florinda Vega García, era hermana de El Carbonerillo, un cantaor que murió con 31 años y dejó 92 grabaciones”. Roldán fue proyectista de Radiadores Roca. “Me eligieron presidente porque soy el que vive más cerca de la peña”. Otro conducto de su vocación era un tío arriero. “Era amigo de Farruco y Chocolate, todos pasaban por su casa”.

Pastora Pavón representa “un modelo de flamenca y de mujer empoderada”, dice el vicepresidente de la peña. “Con 12 años se hizo cargo de la familia. Su padre se partió la espalda trabajando en el ferrocarril de Extremadura; su hermano Arturo perdió la voz”. Siendo una niña prodigio, cautivó al pintor Zuloaga, que la llevó a un café cantante de Bilbao. Embrujó a Lorca y a los poetas del 27. Julio Romero de Torres la retrató. “El cuadro acabó en Buenos Aires y el pintor le mandó una copia que no le gustó a la artista”, cuenta Camacho.

En el patio de la peña hay una placa conmemorativa del centenario de la muerte de Manuel Torre, jerezano de cuna, que vivió y murió en la calle Amapola, cerca de San Luis. Algunos creen que la peña debe su nombre a este patriarca del cante flamenco. El nombre viene de que la peña se funda en la calle Torres. La fundó Juan Campos Navarro, maestro ceramista. Los primeros socios regularon la asociación en el Gobierno Civil. Se funda en 1974 y se traslada en 1976 a la calle Torrijiano. “La iba a bendecir el padre Estudillo, el capellán de la Maestranza y del Sevilla, pero no llegaba y Antonio Mairena rompió una botella de manzanilla”.

Fue Mairena el que sacó a la Niña de los Peines del ostracismo que siguió a su auge inicial. “Promovió a través de la tertulia de Radio Sevilla la estatua que hizo Illanes en vida de Pastora”. Las actuaciones y charlas tendrán lugar en la sede de la Peña, epicentro telúrico del flamenco. “Hablan de Triana, los Puertos y Jerez, pero con la gente que salió de la Puerta Osario a la Alameda sale un cartel impresionante”, dice Roldán, que suelta la retahíla. Pastora Pavón nació en la calle Butrón; su hermano Tomás, en la calle Leoncillos; El Carbonerillo nace en Sol y muere en Don Fadrique; Vallejo era de la barreduela de Padilla; Manolo Caracol, de la calle Lumbreras; Antonio el Bailarín, de Hombre de Piedra; Aurora Vargas vino al mundo en la calle Sorda; José el de la Tomasa fue vecino de la peña y ya canta un bisnieto de Pies de Plomo, que vivió en la calle Ciegos (hoy Pacheco y Núñez de Prado).

La peña lleva un año esperando que la reciban en el distrito y un cuarto de legislatura aguardando la subvención.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios