Burger King sigue ampliando su presencia en Sevilla. Tras la última apertura en las inmediaciones de San Lázaro el pasado marzo, la enseña americana de comida rápida prepara ya un nuevo establecimiento en un enclave estratégico: la manzana de viviendas situada frente al puente de la Barqueta, ubicada en uno de los accesos principales al centro de la ciudad. La inversión prevista en estas obras (sin contar mobiliario ni maquinaria) supera los 150.000 euros. 

Será en los bajos de este edificio donde se abra la nueva hamburguesería. En concreto, según el proyecto de instalación y apertura presentado por Ildefonso Cantalejo, ingeniero técnico industrial, el establecimiento ocupará tres locales comerciales. Los inmuebles se encuentran dentro del sector 9, que abarca desde San Lorenzo a San Vicente, y en un entorno BIC (Bien de Interés Cultural) de protección, al estar a menos de 50 metros de la Muralla de la Macarena y del Monasterio de San Clemente. 

El nuevo negocio no conlleva modificación alguna de los huecos existentes en la fachada de la manzana de viviendas, que tiene protección patrimonial D. Sólo se actuará en ellos para sustituir las carpinterías y habilitar una puerta de acceso, según detalla el mencionado proyecto. Este bloque de pisos hace las veces de esquina, por lo que cuenta con dos fachadas. Una a la calle Torneo y otra a Puerta de la Barqueta.

Localizador del futuro establecimiento. Fuente: Burguer King.

El establecimiento dispondrá de planta baja y entreplanta. Tendrá acceso directo desde la vía pública. Abrirá de domingo a jueves, de 10:00 a 2:00. Los viernes y sábado ampliará este horario hasta las tres de la madrugada. La carga y descarga de algunos productos, así como la preparación interior de los alimentos, se realizará fuera de ese horario, pero nunca antes de las 6:00. 

En total, el negocio constará de 486 metros cuadrados de superficie, dividida en dos partes diferenciadas, la zona de servicios internos y la de público. La primera está pensada para la elaboración de los productos alimenticios y la atención al cliente. La segunda alberga las zonas de consumo y los aseos. Se ha diseñado de manera que en ella no existan barreras arquitectónicas. 

La planta baja tendrá 396 metros cuadrados, de los que 323 serán útiles. Contará con dos zonas de consumo. Una de 117,55 metros cuadrados y otra con 40,24. Otra área donde los clientes podrán comer los productos de esta cadena se situará en la entreplanta, donde dispondrán de casi 70 metros cuadrados para ello. 

El proyecto incide en que la parcela es de fácil acceso para los bomberos en caso de emergencia. Asimismo, todos los elementos estructurales que la integran son "resistentes al fuego". Debido a su amplio horario de apertura, cuenta con una proteccion especial contra el ruido, pensada sobre todo para los residentes de la manzana de pisos donde se encuentra. Por tal motivo, las particiones interiores, las paredes separadas y las fachadas incluyen el aislamiento acústico requerido. También posee una envolvente adecuada para garantizar el bienestar térmico sin hacer uso desmesurado de la demanda energética. 

El plazo de ejecución de estos trabajos se explicitará en la firma del contrato entre la adjudicataria de las obras y la enseña norteamericana. El presupuesto contemplado para la ejecución material de los trabajos es de 152.145 euros, cantidad a la que deben sumarse el gasto en mobiliario y maquinaria para la elaboración de los productos. 

Con este nuevo establecimiento serán más de 20 los que Burger King posee en la capital andaluza (48 en toda la provincia sevillana). El más reciente se inauguró el pasado marzo en la Avenida Juventudes Musicales, a escasos metros del Hospital de San Lázaro y el puente del Alamillo. También al norte de la ciudad. Se invirtió en su apertura un millón de euros. Destaca en él su decoración, con una apuesta por materiales sostenibles, una línea que seguirá en el negocio de la Barqueta. La enseña se ha convertido en una de las multinacionales que mayor cantidad de empleo genera en Sevilla, con 1.500 puestos de trabajo en la actualidad. 

El edificio donde abrirá el nuevo Burger King está catalogado con protección D, de ahí que sólo se intervenga en las carpinterías de la fachada y no se alteren sus huecos. El bloque lo reformó en su día el arquitecto sevillano José Espiau y Muñoz, a quien se debe el lujoso Hotel Alfonso XIII. La empresa Acciona se encargó de acondicionarlo para su uso residencial, con 30 viviendas y 11 locales, de los cuales tres ocupará ahora el negocio de comida rápida. 

Su ubicación resulta estratégica para cualquier multinacional. Supone una de las entradas más importantes al Casco Antiguo y uno de los accesos a la Alameda, bulevar que goza actualmente de una amplia oferta de ocio y restauración. Está situado en el arranque de Torneo, uno de los principales ejes de comunicación de la ciudad. Y otro dato que no debe olvidarse: se sitúa a escasos metros del parque temático Isla Mágica, cuyos visitantes coinciden en buena medida con el mercado de clientes de la enseña norteamericana.