Calle Rioja

Caballos en el Lope de Vega

  • Emoción. Aunque Kasparov retuvo su título de campeón del mundo, Anatoly Karpov volvió emocionado al escenario de la final de 1987 y disputó una simultánea contra diez rivales

Anatoly Karpov entra en el Casino de la Exposición, junto al teatro Lope de Vega donde se enfrentó a Kasparov.

Anatoly Karpov entra en el Casino de la Exposición, junto al teatro Lope de Vega donde se enfrentó a Kasparov. / Manuel Gómez

SEISCIENTAS escuelas de ajedrez en 43 países. Es el legado de Anatoly Karpov, que ha vuelto 31 años después al teatro Lope de Vega donde se enfrentó a Gari Kasparov por el campeonato del mundo de ajedrez. Empataron a 12 partidas y retuvo el título el de Azerbaiyán. Ayer jugó una simultánea contra diez rivales. Dos de ellos ya se habían enfrentado al ajedrecista ruso. Quique Setién, entrenador del Betis, lo hizo cuando jugaba en el Logroñés. “Lo bajé en mi coche desde un pueblo de la Rioja, Autol”.

El otro rival reincidente se llama Jesús Muñoz Alonso y preside la delegación provincial de Ajedrez. Nació en El Pedroso, el pueblo del editor José Manuel Lara. “Lara tenía dos aficiones, el billar y el ajedrez. Jugaba con mi padre en el casino del pueblo”.

El torneo de Sevilla se disputó en tres partidas semanales entre el 12 de octubre y el 19 de diciembre de 1987. Cinco años después de la partida inaugural se clausuraba la Expo. “El Campeonato Mundial de Ajedrez fue el primer lanzamiento publicitario de la Expo de Sevilla”, recuerda Joaquín Díaz, uno de los tres árbitros del mundial, el único español.

Es la undécima visita de Anatoly Karpov (Zlatoust, Urales) a España. La primera fue en 1981. En una simultánea en Brenes le lloraban los ojos. “Entonces se fumaba mucho”, dice el árbitro. Del Apaguen los cigarrillos se ha pasado al comienzo de las partidas al Apaguen los móviles.

Karpov y Kasparov en la Sevilla del 87, Rubicón entre el 82 y el 92, entre Naranjito y Curro. Tomás, un niño de once años, le pregunta que cuándo será el ajedrez asignatura en los colegios. Dice que lo es en muchos países. Pronto abrirá tres nuevas escuelas en China. Colecciona sellos, es miembro del Parlamento ruso y desde ayer tiene una camiseta que le regalaron Haro y Setién. De Kobelev y Kassumov a Karpov. En 1987 Gordillo estaba en el Madrid y Joaquín en el colegio.

Agradeció el detalle de ElDesmarque, que lo trae a Sevilla para recordar un duelo físico entre dos inteligencias. “Cuando fui campeón del mundo pesaba 48 kilos”. El día del Pilar de 1987 los caballos entraron en el teatro Lope de Vega, como le gusta a Távora; las torres eran tan sólidas como las de Aníbal González; los peones, de pedigrí, procedían de la dictadura del proletariado. Cada rival con su rey y su reina, de un país que vivió el tránsito de los zares a los soviets. Se enfrentó a los campeones masculino y femenino de 14 y 12 años y al doctor Pablo Muñoz-Cariñanos.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios