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Del Circo del Sol a la Fundación Cajasol

  • Tributo. José Luis Losa, con el apoyo virtual del actor Antonio de la Torre, presentó la trigésima edición de los premios de la Comunicación con recuerdo a los nueve periodistas fallecidos

El periodista José Luis Losa se dirige al público durante la presentación de los premios.

El periodista José Luis Losa se dirige al público durante la presentación de los premios. / m. g.

José Luis Losa, de la escuela de actores del padre Isaac de los Padres Blancos de la que salieron talentos como Antonio Dechent, Paz Vega o Víctor Carretero (de los Síndrome), que tiene en cartel en el Antiquarium el Pilatos, compartió con Antonio de la Torre la presentación de la gala de la trigésima edición de los premios de la Comunicación de la Asociación de la Prensa. Y el alcalde, Antonio Muñoz, presente en la Fundación Cajasol, dio a entender que si la Gala de los Goya vuelve a celebrarse en Sevilla, tratará de convencer a Fernando Méndez Leite, director de la Academia de Cine, para que los presentadores sean los mismos.

La presencia de Antonio de la Torre fue virtual, apareció en el vídeo de apertura con imágenes del fotógrafo Tomás Díaz Japón. El actor malagueño llegó al cine desde el periodismo, concretamente desde el periodismo deportivo que a su vez entregó sus premios en Carmona. El camino de Losa es a la inversa: del periodismo va flechado a la interpretación. Mostró unos recursos increíbles en su número de periodista malabarista, metáfora de estos tiempos, rodado con intérpretes del Circo del Sol.

En una analogía cinematográfica, las principales estatuillas fueron para las periodistas Lourdes Lucio-Villegas y Lucrecia Hevia. Menciones especiales para Rosa Llacer, que formó parte del equipo fundacional de Diario de Sevilla, Encarnación Freire y Miguel Gallardo por sus cincuenta años de ejercicio del periodismo, una escuela oficiosa de reporterismo por la que han pasado más de doscientos futuros profesionales. Santiago Sánchez Traver fue nombrado socio de honor. Alma de Diario 16 Andalucía, en su etapa de presidente de la Asociación de la Prensa, cuando la sede estaba todavía en la plaza de San Francisco, se crearon estos premios de la Comunicación.

Hay vasos comunicantes entre los colegas premiados. Miguel Gallardo entrenó al baloncesto a Lourdes Lucio-Villegas, que después aplicó en el periodismo el consejo del míster de bajar a defender. José Luis Losa, el mantenedor de la gala, se emocionó al recordar que entró de prácticas en Abc y el director le propuso prorrogar la estancia para sustituir a Encarna Freire, de baja entonces para dar a luz a su hijo, que casi tres décadas después asistía a la gala en la que era reconocida su madre.

Hubo un remedo de nominaciones a los Grammy de tres cantantes insospechados: Antonio Muñoz, alcalde de Sevilla; Juanma Moreno Bonilla, presidente de la Junta de Andalucía; y Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. A la gala asistió un ex presidente del Gobierno andaluz, Manuel Chaves. A la misma hora, en otra sala de la Fundación Cajasol (sala Antonio Machado) empezaba Alfonso Guerra su conferencia sobre Miguel Hernández. Se daban cita en el antiguo edificio de la Audiencia tres protagonistas de la histórica foto de la tortilla: Chaves, Guerra y Pablo Juliá, flamante director de la Academia de Bellas Artes de Cádiz.

El alcalde comparte colores balompédicos con Juan Ignacio Zoido y con Antonio Rodrigo Torrijos, que asistió a la gala. Dos de las premiadas, Lourdes y Rosa, estaban simultáneamente en dos teatros de los sueños: en el salón de actos de la Fundación, entrada por calle Chicarreros, y en Old Trafford, de donde iban llegando las noticias de Mánchester: el gol inicial de los ingleses, el empate del Betis. Chaves informó de la goleada mientras departía con Jesús Maeztu, Defensor del Pueblo Andaluz. Mal día para la defensa. Antonio Muñoz tiene una foto en el Alcázar con Bobby Charlton cuando éste acompañó a la delegación del Manchester United que jugó contra el Sevilla, que lo eliminó para caer frente al Leicester entrenado por un tal Shakespeare.

Lourdes Lucio aparece por orden alfabético entre José Luis Losa y Mai Mancheño en el libro de retratos periodísticos La fauna en su laberinto, de la fotógrafa María José Carmona. Y dice en primera persona la periodista de El País: "Cuando era chica mi objetivo era ser la primera mujer en presidir el Real Betis. El periodismo entró en mis venas a través de la revista Don Balón, que mi padre compraba puntualmente. Me sabía de memoria las alineaciones de los equipos de fútbol". Rosa Llacer, hoy empresaria de la comunicación, pasó por Estadio Deportivo. Lucrecia Hevia dirige la edición andaluza de diario.es. Se forjó como periodista en La Nueva España de Oviedo.

Lo que nos aprendimos todos de fue la alineación de los compañeros que nos dejaron: Santi Roldán, José María Gómez, Antonio López, Carlos Quevedo, José Antonio Colinet, Juan Antonio Bermúdez (su nombre también apareció en la galería necrológica de los Goya), Antonio Ramos Espejo, Jesús Quintero y Diego Caballero.

Recordaron a sus maestros: Lourdes, a Sol Fuertes y Soledad Gallego-Díaz; Sánchez Traver, a Manuel Lorente y Román Orozco. Miguel es el segundo de los cuatro Gallardo de la saga, todos hermanos de la Soledad de San Lorenzo. Recordó los 35 años de vida profesional que lleva compartiendo con Marina Bernal. Encarna Freire fue jaleada por las compañeras con las que comparte el blog Tipas de interés, dedicadas a la información económica. En los dominios de Keynes, Schumpeter y Fuentes Quintana.

La biografía es uno de los géneros que más cultivan los periodistas: Antonio Fuentes ha terminado la de Horacio Hermoso, el último alcalde republicano de Sevilla; Sánchez Traver, que enseñó Matemáticas a los futuros arquitectos, la de Curro Cúchares, torero muerto en La Habana y enterrado en San Bernardo. Una semana antes de la gala, Miguel Gallardo presentó en Lora del Río la biografía que ha editado de Gracia Montes. Entre Mánchester y Heliópolis, entre Nervión y Estambul, una tarde-noche muy deportiva con un entrenador de baloncesto y otro de atletismo. La sombra de Kapuscinsky es alargada. Sin periodismo no hay democracia, dijo Rafael Rodríguez, presidente de la APS. Sin buenos periodistas, que antes deben ser buenas personas.

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