Colega-Sevilla critica el dispendio del Ayuntamiento en la organización del Orgullo Gay

El Colectivo de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales de la provincia de Sevilla (COLEGA-SEVILLA) mostró su "estupor" ante el dispendio que el Ayuntamiento de Sevilla hará en torno a la organización del Orgullo Gay que se celebrará el próximo 27 de junio en la ciudad.

Según declaraciones de la delegada de Cultura del Ayuntamiento de Sevilla, Maribel Montaño, el Consistorio aportará en torno a 100.000 euros para los conciertos que se realizarán el viernes y el sábado por la noche, aunque Colega-Sevilla calcula que "el gasto total puede superar los 120.000 euros", indicó en nota de prensa.

"Colega-Sevilla lamenta que el Ayuntamiento se dedique al derroche de dinero público en esta época de lamentable crisis económica, y crea que con una fiesta para contentar a unos pocos acabe con su responsabilidad en la realización de políticas sociales de sensibilización y de lucha contra la homofobia", añadió.

El presidente de Colega-Sevilla, Antonio Ferre, se preguntó "cuántos proyectos sociales se podrían realizar en todo un año con este presupuesto", y espetó al Alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, a que "celebre menos Cabalgatas y haga más proyectos sociales".

"Llevamos todo un año sensibilizando con talleres, charlas y mesas informativas, visitamos institutos de enseñanza, asociaciones de vecinos y todo para quitar los estereotipos que tiene aún la sociedad sevillana sobre los homosexuales. Y ahora con una fiesta que hace del estereotipo su principal atractivo, se termina de un plumazo todo el trabajo de un año. Es lamentable", agregó Ferre.

Al hilo de esto, dijo que "ciertamente existe el estereotipo gay", pero, apuntó, "es sólo la punta de un iceberg de miles de personas homosexuales que viven tranquilamente su sexualidad sin hacer alardes ni escándalos, con corbatas y sin ellas, no haciendo de su orientación sexual el núcleo de su existencia".

Sin embargo, quiso aclarar que "no está en contra de la fiesta del orgullo en sí, siempre que se considere eso, una fiesta, un carnaval". "De lo que no estamos a favor es de intentar dotarla de un contenido social y reivindicativo que ya no tiene, y que se emplee de este modo el dinero público de políticas sociales", concluyó Ferre.