El Ayuntamiento de Sevilla ha asegurado que en un periodo de seis meses, antes de la llegada del próximo verano, el sentido único en dirección Oeste-Este (Resolana-Prado de San Sebastián) estará instaurado y normalizado en la ronda histórica de la ciudad hispalense.

El concejal de Movilidad, Francisco Fernández, indicó a Europa Press que la Corporación Municipal se encuentra todavía a la espera de recibir los resultados de los estudios técnicos de incidencia que la delegación está realizando antes del cambio.

Estos informes, que se conocerán a lo largo del primer trimestre de 2008, son necesarios para dilucidar las actuaciones concretas a realizar en este tramo viario. Las principales intervenciones que tendrán que llevarse a cabo en la ronda histórica consisten en cambios de señalización, semafóricos y de elementos físicos de separación, según explicó Francisco Fernández, que añadió que, en función de estas actuaciones y su ritmo de habilitación, el Consistorio podrá cambiar “antes o después” el sentido de la circulación rodada en aquellos tramos en que sea necesario.

El edil de Movilidad aseguró que, en todo caso, “será antes del verano, sin duda” cuando la ronda histórica de Sevilla disponga ya de un único sentido de circulación del tráfico “porque, afortunadamente, en esta actuación vamos en plazo”.

La intención del Ayuntamiento hispalense es que el cambio vial se produzca con la mayor normalidad y simplicidad posible para los ciudadanos. Uno de los aspectos pendientes de los resultados de los informes encargados por la delegación de Movilidad, en este sentido, es la determinación de las entradas y salidas a la ronda histórica.

La implantación progresiva del sentido único en esta arteria principal de la capital andaluza se verá apoyada por la señalización viaria y un dispositivo de la Policía Local para mitigar los problemas en los viarios, ya que, según admitió el propio Francisco Fernández, “los hábitos de uso son muy importantes”.

Así, el Ayuntamiento de Sevilla empezará el proceso de reordenación del tráfico por la ronda histórica y, posteriormente, se irán adaptando el resto de grandes avenidas y las intersecciones con la propia ronda.