El Hospital Universitario Virgen del Rocío se convierte en el líder andaluz en trasplantes y donaciones durante los primeros siete meses de este año. En concreto, ha registrado 47 donaciones de órganos y 9 de tejidos, junto a 179 trasplantes, de los cuales 43 han sido hepáticos, 125 renales y 11 de corazón.

En Sevilla la tasa de aceptación a la donación de los órganos y tejidos es del 92% de los casos. Unas cifras que ayudan a que las posibilidades de que pacientes en fase terminal dispongan de un órgano para salvar su vida. 

Además esta importante actividad ha permitido que la lista de espera para trasplante de órganos se haya visto reducida en más del 2% en Andalucía, según los últimos datos de la Coordinación Autonómica de Trasplantes.

En el caso del hospital hispalense, cabe destacar las 18 donaciones en asistolia con perfusión regional normotérmica (PRN), insuficiencia de las contracciones del corazón, que los profesionales han efectuado hasta julio de este año, siete más que las practicadas durante 2018.

De manera que cumple así con uno de los objetivos que ha marcado para este año la Coordinación Autonómica de Trasplantes, que quiere incrementar la actividad en este ámbito por los extraordinarios beneficios que tiene para los pacientes que los reciben.

El programa de donación y trasplantes se inició en Sevilla hace más de 40 años. Por todo, y gracias a la solidaridad de las familias y allegados junto al esfuerzo de los profesionales que se dedican a esta labor, ya se han superado los 4.600 trasplantes de órganos en todo este tiempo.

Por todo, el equipo de Coordinación de Trasplantes de Sevilla y Huelva, liderado por Luis Martín Villén, agradece públicamente a todas las familias y allegados la generosidad que muestran en unos momentos tan difíciles para ellos, y que está suponiendo un récord de aceptación y solidaridad en toda la comunidad autónoma.

Igualmente, reconoce y subraya el esfuerzo de todos los profesionales del hospital a la hora de promover la donación, activar los protocolos y efectuar las intervenciones necesarias en los tiempos tan ajustados que requieren estos procedimientos, para mejorar la calidad de vida o dar una oportunidad de vida a las personas que padecen un grave problema de salud.