La Junta estudia la viabilidad de una línea fluvial de La Puebla a la Cartuja

La Consejería de Fomento y Vivienda (IU) de la Junta de Andalucía se ha propuesto estudiar seriamente la viabilidad de dos líneas fluviales de transporte regular y diario de pasajeros con un coste mínimo gracias al uso de barcos con energía sostenible (solar o híbrida -solar más gas-) y al uso de los embarcaderos ya existentes. Otra condición es que sean intermodales, esto es, que conecten con transportes ya existentes (bici, autobuses, Metro y Cercanías) para garantizar una elevada demanda de viajeros y, por tanto, su rentabilidad.

La de transporte interurbano va por el cauce vivo desde La Puebla del Río pasando por Coria, Gelves y San Juan de Aznalfarache hasta llegar a la Cartuja, al embarcadero junto al apeadero de Cercanías que se usaba en la Expo92. Se estudiará asimismo la posibilidad de extenderla a La Algaba.

La línea urbana recorre la dársena de la ciudad con un trazado que se definirá con los estudios de demanda de pasajeros todavía por concluir. Inicialmente se estima que debe cubrir un recorrido entre el centro, Triana, el recinto ferial y San Jerónimo en ambas orillas o en una sola, ya se verá.

El estudio forma parte de un proyecto de I+D+i que promueve la Consejería de Fomento y Vivienda, cofinanciado con Fondos Feder. Sus conclusiones se conocerán en junio de 2015, tras un año y medio de análisis, y entonces se sabrá si son viables ambas líneas fluviales, así como la inversión que requieren y los puntos de parada más recomendables para que sean rentables.

El proyecto fue encargado por la Agencia Pública de Puertos de la Junta que dirige Miguel Paneque a finales de 2013 a las Universidades de Sevilla y Cádiz. Con un presupuesto de 258.000 euros, la Universidad de Cádiz estudia el prototipo de embarcación sostenible que se usará en ambas líneas. El Departamento de Ciencias y Técnicas de la Navegación es el investigador principal del proyecto, denominado GuadaMar.

El reto de los investigadores es diseñar un barco que sirva para ambas líneas y cuyo boceto inicial puede verse en las imágenes que reproducimos en estas páginas. En la dársena de la ciudad debe ir más lento y más rápido en el cauce del río vivo. En la dársena el objetivo es que alcance una velocidad por encima de los 4 nudos (7 km/h) que actualmente marca Capitanía Marítima pero sin provocar más olas, de forma que no afecte a las embarcaciones deportivas, de recreo y turísticas. Si se logra este reto es más fácil que Capitanía acceda a subir la velocidad límite en la dársena. "Si es así, Capitanía podría ver con buenos ojos modificar la norma de velocidad máxima", explica Paneque.

Para ser competitiva con los 12 kilómetros por hora a los que circula el autobús (línea 3 de Tussam Pino Montano-Bermejales) la línea fluvial urbana debe alcanzar un mínimo de 5 nudos y un máximo de 8, que equivalen a 9,26 y 14,8 kilómetros por hora.

En el cauce vivo, se necesita una velocidad de 15 a 20 nudos (de 27,7 a 37 kilómetros/hora) para hacer competitiva la línea en relación a otros transportes.

Por parte de la Universidad de Sevilla, el Departamento de Proyectos Arquitectónicos de la ETS Arquitectura de Sevilla actúa como investigador principal, con un presupuesto de 52.254 euros. El encargo consiste en estudiar la demanda que tendrían ambas líneas y su adaptación a los embarcaderos existentes. El proyecto se denomina Met_Río.

La Universidad hispalense analizará la accesibilidad desde los embarcaderos a otros modos de transportes (Sevici, estaciones de Metro próximas y estación de FFCC), para garantizar la intermodalidad con el transporte público existente y captar así una demanda segura.

En función de los resultados de ambos estudios, la Consejería de Fomento y Vivienda decidirá llevar o no a cabo estas líneas fluviales con un posterior análisis económico-social y técnico. Desde que acaba el estudio, la Junta dispone de casi un año hasta el fin del mandato en marzo de 2016 para decidirse.

Miguel Paneque, director de la Agencia Pública de Puertos, recalca que de momento no hay ningún compromiso político de PSOE e IU con este proyecto mientras no se conozcan sus conclusiones. "Todavía no tiene una consideración de proyecto de Gobierno de la Consejería hasta ver su viabilidad. A día de hoy no sabemos si las hipótesis de trabajo funcionarán", asegura insistiendo en que hay que esperar al año que viene.

Respecto a pasajeros, Paneque agrega que las embarcaciones se diseñarán para acoger a 100 personas y 10 bicis. Los embarcaderos que existen son "suficientes" y se utilizarán sin necesidad de construir otros nuevos para ambas líneas. Únicamente hay que ver si requieren una mejora técnica complementaria. La explotación de la línea podrá ser pública o privada. La Junta lo dirá.