Un Orgullo precedido de polémica. Las fotos expuestas en la Avenida de la Constitución, en las que se contempla a personas del mismo sexo besándose así como a integrantes del colectivo gay mostrando partes púdicas del cuerpo, han llegado a la oficina del Defensor del Pueblo Andaluz que dirige Jesús Maeztu. Este departamento ha recibido más de 400 consultas por parte de ciudadanos que muestran su preocupación por la lesión que dicha exposición, en plena vía pública, puede ocasionar en los derechos del niño. Una queja que, en cierto modo, abanderó el PP al pedir la retirada de la muestra por considerarla "obscena y de mal gusto", además de ser "una falta de respeto" para el colectivo LGTB. 

Maeztu, a la espera de hacer una valoración más profunda sobre este asunto, advirtió ayer que "en principio" las fotos no vulneran los derechos del menor. El Defensor del Pueblo recuerda que el artículo 20 de la Constitución ampara el derecho a la libertad de expresión y producción artística. Una libertad, no obstante, que debe ser matizada con otros derechos, como los referidos a la protección de los menores de edad. También mencionó una sentencia de 1982 del Tribunal Constitucional que advertía de la necesidad de rodearse de "garantías necesarias" para evitar que "un concepto ético" produzca "una limitación injustificada de derechos y libertades". 

En el terreno político, las fotos del Orgullo han creado un bloque común contra los populares a dos días de la cita con las urnas. La Plataforma 28-J (organizadora de la marcha de esta tarde) y los grupos municipales del PSOE, Ciudadanos, Participa e IU exigieron ayer al PP que "reflexione y rectifique" por su "llamada al odio" y a la "homofobia" al pedir la retirada de la muestra fotográfica. El delegado de Cultura, Antonio Muñoz, dijo -en referencia al PP- que "la cabra siempre tira al monte", mientras que el edil de Ciudadanos, Javier Moyano, acusaba a los populares de "enturbiar" el mes de la diversidad. 

Por su parte, la portavoz de Participa, Susana Serrano, defendió que el debate que quiere generar el PP "ya se ha superado". Su homólogo en IU, Daniel González Rojas, acusó al PP de "querer llenar de armarios la Avenida de la Constitución". 

Los efectos de esta polémica se vieron ayer en las fotos, algunas de las cuales aparecieron con pintadas en las que se criticaba que se mostrara a dos hombres besándose.