Los peritos de la Policía Científica ratifican haber hallado restos biológicos de Marta del Castillo en el piso de León XIII, no obstante sólo pueden acreditar haber hallado sangre en el chaquetón de Miguel Carcaño.

En la decimoquinta sesión del juicio por el crimen de Marta han comenzado las demostraciones de la pruebas periciales realizadas durante la investigación del crimen de Marta. Los peritos han detallado los restos hallados en diferentes zonas de la casa de Carcaño así como en determinados objetos tales como la silla de ruedas, en la que presuntamente se sacó el cadáver de la joven de la casa, el tensiómetro con el que Miguel dice haber comprobado que Marta había fallecido, una alargadera o rollos de fixo y esparadrapo.

Los peritos han comenzado su intervención explicando la forma en la que extrajeron las muestras de ADN tanto de la fallecida como de los imputados para después demostrar el hallazgo de dichas muestras en diferentes pruebas analizadas, así como su estudio mediante la técnica llamada frotis.

En relación al chaquetón de Carcaño requisado de la casa de Camas en la que vivía junto a la que era su novia, la Policía Científica ha detallado haber localizado tres manchas y asegura que una de ellas "era coincidente con el perfil genético de Marta" y que "era sangre".

No obstante, su comprobación no ha podido ser tan específica en el resto de pruebas analizadas, según han destacado, porque se trata de "muestras críticas" -es decir con muy poco ADN-, debido quizá a la limpieza a la que se sometió el piso tras el crimen. Por ello, los peritos han hablado en todo momento de "restos biológicos" sin especificar la naturaleza de los mismos.

De este modo, han destacado la localización de diez muestras de la silla de ruedas en la que el cuerpo de Marta pudo ser sacado de la vivienda, de las que se extrae una mezcla de restos biológicos tanto de la joven como de Miguel Carcaño. También se han localizado "muestras completas y perfectas" de ambos en el tensiómetro y de Marta y el Cuco en la habitación de Carcaño, donde la almohada de la cama también presentaba restos de la joven. No obstante, se ha descartado la existencia de restos en la mesa del ordenador.

Los restos de María García y de Javier Delgado sólo fueron hallados en un rollo de fixo y esparadrapo, en el caso de la primera, y una mezcla de ambos en una alargadera.

No obstante, los peritos han afirmado no haber detectado "nada" en relación a los restos biológicos de Samuel Benítez.

Los peritos han aclarado que las muestras halladas eran "relativamente recientes" aunque han asegurado que "establecer la antiguedad es imposible". Del mismo modo han precisado no poder asegurar el hallazgo de sangre en otras muestras, además del chaquetón de Carcaño, aunque han precisado que ese resto biológico es que el que más perdura.

"Mi experiencia de 27 años me dice que el resto que más perdura en el tiempo es la sangre, pero yo no puedo demostrar científicamente esa naturaleza de los restos", han explicado.