Esta semana la antigua Fábrica de Tabacos de Sevilla salta a la palestra al acoger la salida y el final de la Cabalgata de Reyes que se celebra en el centro de la ciudad en la tarde del 5 de enero. Más allá de eso, su presencia en la ciudad recuerda la importancia del patrimonio industrial, muchas veces olvidado en favor de los inmuebles o bienes más artísticos.

La primera de toda Europa

El edificio que ahora acoge la sede de la Universidad de Sevilla se construyó en el siglo XVIII, cuando se constituyó como la primera fábrica de tabacos a nivel europeo. Es a su vez uno de los más grandes edificios industriales de la etapa del Antiguo Régimen que hay en España y que se encuentran conservados en el continente. 

Se localiza muy cerca de la Puerta de Jerez, del Colegio de San Telmo y del convento de San Diego de Alcalá, todos localizados en el momento de la construcción de la fábrica fuera de las murallas sevillanas.

Su tamaño es de 185 x 147 metros distribuidos en una planta rectangular, según recoge el Ayuntamiento de Sevilla, lo que hace que en territorio nacional solo el monasterio de El Escorial (207 x 162 metros) lo supere en tamaño. El edificio sevillano coincide con el monasterio por el uso de estilo de inspiración herreriana en su planta, aunque la fachada principal de la fábrica se caracteriza por la influencia del estilo barroco. 

Y, como en el momento de su construcción se encontraba extramuros, aunque adosado a parte de las murallas de la ciudad, motivo por el cual gran parte de su perímetro está rodeado por un foso.

La Universidad de Sevilla

No es hasta mediados del siglo XX cuando el edificio adquiere el uso que tiene hoy en día: dar cabida a parte de la Universidad de Sevilla. Esto hizo que en algunas zonas exteriores se realizara un lavado de cara, para adaptarlo a las nuevas necesidades. Se crearon nuevas puertas en las fachadas este, sur y oeste, cuya ornamentación fue esculpida por Antonio Cano Correra y Carmen Jiménez Serrano. Estas puertas dan acceso a las facultades de Derecho, Ciencias y Filosofía y Letras que se encuentran en el edificio. 

El pasado año 2022 la antigua Fábrica de Tabacos recuperó las visitas guiadas, unos eventos que se suspendieron temporalmente debido a la pandemia de covid-19. Estas visitas permiten conocer algunos de los puntos más importantes y característicos del inmueble como son el Patio del Reloj, la capilla o la Gipsoteca, un museo especializado en el que se encuentran más de un centenar de vaciados en yeso de diferentes etapas de la historia del arte.

Las visitas al rectorado de la universidad se llevan a cabo los martes y jueves dos veces al día de forma gratuita. Se pueden reservar las entradas en el siguiente enlace.