Las asociaciones Foro de Heliópolis, Parque Vivo del Guadaíra, Pisos del Sector Sur y Bermejales Activa han enviado un escrito para manifestarse a favor de un puente como solución para que la SE-40 cruce el río, pero con una condición: “que el ahorro de mil millones de euros revierta en solventar otros problemas de infraestructura en la zona Sur, que son tres: el Metro, la ampliación del puente del Centenario, y las comunicaciones del Aljarafe con la ciudad”.

"El conflicto gira principalmente el torno al dinero y el Ministerio de Fomento está prácticamente decidido a no emprender una obra faraónica, si lo puede resolver con una obra eficiente y digna"

Precisan que la ampliación del Centenario sería más interesante para llevarlo a 10 carriles con estructuras laterales, como se ha hecho en el puente gallego de Rande. Y para el Aljarafe proponen “una nueva conexión viaria a un nuevo puente, de la hechura y junto al de las Delicias, lo cual resolvería bastante el problema”.

Respecto a la SE-40 apuestan por el puente “sin asfixiar al Puerto. Solo así podremos conseguir la rápida solución de unos problemas acuciantes”, señalan.

Argumentan que es más rápido hacer un puente que los túneles. “Una construcción rápida serviría para ayudar a descongestionar la SE-30, que debido al tráfico de camiones y a la congestión de sus intersecciones plantea preocupantes problemas de ralentización y polución”.

Estiman que “un puente con un gálibo de 45 metros, holgadamente suficiente para el paso de buques de carga y de cruceros, tendría una ejecución relativamente corta en comparación con los dos túneles de la alternativa bajo el río”. Y recalcan que los problemas de tráfico y polución no afectan sólo a la SE-30, sino a todo el Sur de la ciudad por el centro comercial Lagoh, la Ciudad de la Justicia en Palmas Altas y las 2.800 viviendas detrás del centro comercial. Las entidades rechazan que un puente sea obstáculo para el Puerto: “no parece que su miedo esté fundado”, afirman.

En el escrito recuerdan que las obras del tramo sur de la autovía SE-40 se encuentran casi terminadas, y la decisión sobre el paso del río comienza a pesar sobre la ciudad, sobre todo desde que se ha inaugurado el centro comercial Lagoh en la intersección de la autopista SE-30 y la autopista a Cádiz provocando una considerable congestión del tráfico en ese punto, ya de por sí colapsado por el tráfico de camiones.

Añaden que al debate se han sumado en estos días dos organizaciones de empresarios, Sevilla Ya y Gaesco, además de los alcaldes de varios pueblos afectados, suscitando dos cuestiones que creemos de gran importancia:

• Una, que los argumentos de algunos son ampliamente interesados o propios, sin tener demasiado en cuenta los intereses de la ciudadanía. Hay mucho dinero en juego, y hay obras de gran visibilidad que pueden acarrear rédito político.
• La otra cuestión radica en el hecho de que los túneles requieran la inversión de unos 1.300 millones de euros, mientras que para el puente haría falta la cuarta parte, unos 350. A lo cual habría que añadir el elevado coste del mantenimiento de los túneles, que nada tiene que ver con el del puente. Y junto al coste, debe tenerse en cuenta la oportunidad de desbloquear rápidamente el asunto, pues al parecer el conflicto gira principalmente el torno al dinero y el Ministerio de Fomento está prácticamente decidido a no emprender una obra faraónica si lo puede resolver con una obra eficiente y digna.