Cuando Sidi Ifni era española

Calle Rioja

Hispanidad. Novios, emigrantes, soldados... Los mapas de las 48 provincias de la Plaza de España evocan en los visitantes las azarosas circunstancias de la vida.

Cuando Sidi Ifni era española
Cuando Sidi Ifni era española
Francisco Correal, Sevilla

13 de octubre 2011 - 05:03

LA vida en España. No hace falta salir de los 48 bancos del semicírculo de la plaza que diseñó Aníbal González. Manuel es maestro en Castuera y Paula, su mujer, profesora de instituto en Zalamea de la Serena. Pueblos separados por 12 kilómetros que vienen en el mapa de Badajoz. Vienen con sus tres hijos (Pablo, Miguel, Daniel) a pasar el día. Por la tarde, a Isla Mágica.

Es un regalo que no figuraba en sus previsiones. Manuel Expósito y Ana María García, primos hermanos, nacieron en Oued-Zem, en el corazón de Marruecos. Allí emigraron sus abuelos, Juan García, de Lucainena de las Torres, y Carmen Zapata, de Níjar. Los dos topónimos aparecen en el gráfico de Almería. Los primos se casaron con franceses y viven en Saboya, cerca de los Alpes. Ana María, señora de Bassard, se emociona y repite una y otra vez Lucainena, acento francés, alma andaluza.

La sombra empieza en el banco de Jaén y allí se han sentado dos jóvenes francesas de Grenoble para echarse la crema. No han reparado en el tema que preside el paño del banco: la batalla de Bailén. La primera derrota de Napoleón. Elena, 32 años, y Raquel, 31, son economistas. Están con sus maletas en el banco de Logroño. "Lo hemos elegido al azar, somos de Barcelona. Estamos haciendo tiempo para coger el aero-bus". Ponen fin a unos días de asueto por Granada y Sevilla.

María Ángeles, montañesa de Mataporquera, cerca de Reinosa, le pide a un hombre que aparte la bicicleta que tapa el motivo central del banco de Palencia, la fundación de la Universidad palentina, la más antigua de España, en 1208 por Alfonso VIII. Le hace fotos a Eloy, su marido, carpintero, natural de Aguilar de Campoo. Su paisano Ramón Carande fue rector de la Universidad de Sevilla.

Banco de Tarragona. Un hombre cuenta su historia. "Yo estaba en San Roque, Cádiz, Regimiento de Pavía, 19. Empezó la guerra y nos embarcaron en el Virgen de África hasta Sidi Ifni, que entonces era la provincia 51 de España. Los moros empezaron a pegar tiros y a hacer trincheras, el sargento murió allí mismo. Fue en 1956. De esa guerra no se contaba nada. Franco mandó a Carmen Sevilla para animar a los soldados". Lo cuenta José Antón, 80 años, los que ha cumplido la República evocada con cánticos y banderas. Antón es de Elche y ha venido con su mujer, Luisa Jaén. El tema central de Alicante, la muerte del cartaginés Amílcar Barca, les recuerda la grandilocuencia de los relatos escolares. "Nos hablaban del caudaloso río Vinalopó, que casi no lleva agua". Salvador Soler, su anfitrión, también es de Elche con casa en Sevilla. Le compró a un marqués la finca de la antigua zapatería Ciudad del Betis, que suena a tienda de borceguíes, en la calle Rioja. "Nos conocemos de niños, pero la amistad surgió cuando coincidimos en el viaje de novios", dice la mujer de Antón. Una luna de miel de 1963 que todavía tiene frutos de afecto. No sabían que la presidenta del Parlamento andaluz es de Elche.

En el banco de Toledo una pareja pela la pava. Quique y Leticia se fotografían en el banco de Valencia, la entrada triunfal de Jaime el Conquistador, dibujo de Enrique Orce. Viven en Sagunto, la capital del acero. "Yo me he sentado en el banco de Valencia y el de Cádiz", dice Leticia, "porque mi padre es de Vejer y mi madre de La Línea".

Manuela le da el pecho a su hija Marina, de quince días, en el banco de Vizcaya. Metáfora de la madre patria. La lactante trabaja de empleada de banca. Su hijo Gonzalo disfruta con los coches de caballos. Manuela, 35 años, nunca ha estado en Vizcaya. "Era el primer banco con sombra". Sus padres, los abuelos de Marina, sí conocen esa tierra. "Hemos ido a Bilbao, a Vitoria y San Sebastián", dice la abuela. "Vitoria y San Sebastián no son de Vizcaya", apunta un joven sentado como un tibetano. "Yo sí soy de Vizcaya, pero vivo aquí". Es profesor de Música en el instituto Carmen Laffón de San José de la Rinconada. El día es muy aragonés. Las Pilares de la tierra. No se cabe en el banco de Zaragoza. Unos jóvenes bromean con otro de los paños, también firmado por Orce: "¿Teruel existe?".

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