Tranquilidad. Ésta fue la tónica general en el estreno del plan especial de tráfico de Navidad activado por el Ayuntamiento para estas fechas en el que, además de los cortes de la circulación en el centro, destacan los controles antidroga a los conductores que presenten síntomas de haber ingerido alguna sustancia estupefaciente y los refuerzos policiales.

El Ayuntamiento informó este martes a este periódico que durante la primera jornada de dicho plan ningún conductor dio positivo ni en los controles antidroga ni en los de alcoholemia. En este sentido, cabe recordar que estos test no son aleatorios, sino que se aplicarán a aquellas personas con signos de haber consumido algún tipo de droga que perturbe su conducción al volante. En el caso de que se obtuviera un resultado positivo, las muestras se reenviarán al Instituto de Toxicología, donde se confirmará si los restos extraídos al conductor contienen algún estupefaciente y el tipo de éste. El Ayuntamiento está a la espera de que la Fiscalía General del Estado elabore un protocolo de actuación para este tipo de controles, ya que hay algunas lagunas al respecto.

Uno de los puntos a aclarar es conocer quién se tiene que hacer cargo del coste de la prueba, valorada entre 70 y 80 euros. Mientras la Fiscalía responde a esta cuestión, el Instituto de Toxicología elaborará de forma gratuita los informes.

Al margen de los controles, el tráfico fue también fluido en esta primera jornada del plan de Navidad. No se produjeron retenciones importantes pese a los cortes anunciados en el centro con motivo de la celebración del mapping en la Plaza de San Francisco, una proyección que por segundo año consecutivo ha logrado un gran éxito de convocatoria y que por razones de seguridad ha obligado al Ayuntamiento a desviar los vehículos que lleguen a la Alfalfa hacia Boteros, en lugar de seguir por Jesús de las Tres Caídas.

Lo que sí se notó fue la gran presencia policial en el centro, más de la habitual que otros días, ya que entre otras funciones tienen la de supervisar el estado de la zona azul y de los parkings subterráneos, puesto que una vez que se encuentren completos no permitirán el acceso de vehículos privados. Para ello se han instalado diversos carteles que alertan del corte en caso de saturación.