El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, hizo ayer un llamamiento a la calma y apostó por "salvaguardar la estabilidad de los empleos" en la Gerencia Municipal de Urbanismo, con cuyos trabajadores se mantiene una negociación abierta sobre sus condiciones laborales de futuro. Zoido confirmó que habrá "ajustes" o modificaciones de las condiciones laborales, sin querer entrar en el fondo de la cuestión para no interferir en el proceso iniciado y rechazando hablar de liquidación. No obstante, fuentes municipales autorizadas y del más alto nivel ya apuntaron a este periódico que la intención es ésa, la disolución, así como culminar dicho proceso antes del próximo mes de junio. El Ayuntamiento convertiría la Gerencia en una unidad administrativa más dentro del organigrama de las delegaciones municipales, una intención política que es la principal novedad que se plasma en el borrador del nuevo convenio colectivo que la empresa está discutiendo con los trabajadores. 

El delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, mantiene contactos permanentes con los trabajadores y, según reveló Zoido, él mismo ha participado en alguna reunión junto con el concejal y el sindicato CCOO. "Y cuando se llegue a una solución se verá en qué queda todo este tema", apuntó Zoido, que respaldó la actuación de Vílchez. El alcalde explicó que a una negociación no se puede llegar con posturas fijas. "Vamos a defender la estabilidad en el empleo que consideramos fundamental y los intereses generales de los sevillanos, y no vamos a ceder a ninguna presión de nadie, como no se ha cedido en ningún caso", insistió. 

A la pregunta de si los salarios de la Gerencia de Urbanismo son en estos momentos asumibles o no por el Ayuntamiento, el alcalde se acogió a la protección de datos para hablar sobre los sueldos en cuestión. "Ellos saben lo que ganan y todo el mundo conoce lo que piensa el alcalde sobre eso", comentó, insistiendo en la importancia de no perjudicar la negociación. 

La dirección política propone que los más de 400 trabajadores de la Gerencia pasen a ser funcionarios municipales, ya que la gran mayoría de ellos son personal laboral indefinido a los que hay que sumar un grupo de casi 50 interinos y otro pequeño grupo de trabajadores que ya cuentan con la condición de funcionarios y que en su día quisieron estar asignados a la Gerencia. Tal y como publicó este periódico, el PP ofrece con la funcionarización de los trabajadores una garantía de estabilidad laboral a cambio de una rebaja salarial generalizada para que los sueldos en la Gerencia se equiparen a los que actualmente se cobran en el Ayuntamiento de Sevilla.