El Colegio de Médicos de Sevilla ha detectado un incremento de las agresiones a los facultativos de un 42% en un solo año, con 27 casos tramitados durante 2014, la inmensa mayoría en centros públicos. En el Día Nacional contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario, la institución colegial volvió a reclamar este miércoles a las administraciones "la puesta en marcha de medidas de seguridad disuasorias", así como la reforma del código penal para que estas agresiones sean castigadas como atentados a la autoridad.

De las 27 agresiones registradas el año pasado 15 de las víctimas son mujeres; y cuatro ocurrieron en clínicas privadas. La mayoría de los episodios violentos tuvieron lugar en centros de salud y en urgencias extrahospitalarias. El Colegio de Médicos resalta también "que el mayor número de agresiones las llevan a cabo los pacientes o algún familiar".

Las causas de las agresiones se deben en su mayoría a discrepancias en la atención médica, a las esperas o a la negativa del médico a recetar un determinado medicamento requerido por el paciente, entre otros motivos. En cinco casos las víctimas han sufrido lesiones; siete tuvieron que pedir la baja laboral; y 12 casos terminaron en el juzgado. En lo que va de año, los servicios jurídicos del Colegio de Médicos ya han registrado siete agresiones más. "Esta progresión va en aumento, por lo que desde el Colegio de Médicos se mantendrá la lucha, denunciando y concienciando a la sociedad de que con violencia no se solucionan los problemas asistenciales", afirma la institución.

Con motivo del Día Nacional Contra las Agresiones en el Ámbito Sanitario, el Colegio de Médicos de Sevilla se sumó este miércoles a la campaña de la Organización Médica Colegial (OMC) para hacer frente a este problema. Según un informe anual del Observatorio de Agresiones de la OMC, en el ámbito estatal se registraron 344 agresiones a médicos el año pasado, diez menos que en 2013. Mientras que la tendencia estatal es a la baja, en Andalucía, al igual que en Sevilla, estos episodios aumentaron en el último año. En 2013 se registraron 80 casos, mientras que el año pasado fueron 90, en la comunidad autónoma. Ante estos episodios, la OMC vuelve a reclamar que "se refuercen las medidas preventivas y de protección a los profesionales", entre otras reivindicaciones.

Según el informe nacional del Observatorio de la OMC, "aumenta el número de agresiones de familiares de pacientes que ha pasado de representar el 25% al 31%". De las 71 sentencias analizadas en el ámbito nacional, el 61% fueron calificadas como delito y el 39% como faltas. Lograr que estos actos violentos sean considerados delitos es una meta de la organización que representa a todos los colegios de médicos. "La aprobación por el Senado de la reforma del Código Penal que contempla las agresiones a sanitarios como delito de atentado es un paso decisivo en la lucha contra esta lacra", asevera la OMC. Las sentencias ejemplarizantes se han convertido en una herramienta clave para terminar con la violencia en las consultas.

"Se están registrando agresiones también en centros privados"

Durante 2014 el Colegio de Médicos de Sevilla registró cuatro agresiones en centros privados, un problema que hasta ahora sólo afectaba a la sanidad pública. "Hace años las agresiones se registraban en las Urgencias, por las demoras, y en zonas marginales, pero ahora también afectan a clínicas privadas", explica Juan Manuel Contreras, secretario general del Colegio de Médicos de Sevilla, quien apunta a un problema de educación como causa principal de estos lamentable hechos. "Ahora hay más casos también porque hay mayor conciencia entre los propios médicos a la hora de denunciar", añade el doctor Contreras, quien recuerda el protocolo de la institución colegial que favorece a las víctimas con apoyo legal y psicológico. "Antiguamente, el principal motivo eran las bajas, pero ahora se cuestiona todo, los diagnósticos, los tratamientos. Lo más lamentable es que la sociedad pierda la educación. Las demoras tremendas por los recortes también provocan enfado. Los médicos somos los primeros que sufrimos la falta de personal y de medios", explica el secretario del Colegio.