Los estudiantes de la Universidad de Sevilla (US) han rechazado, por el momento, el adelanto de los exámenes de septiembre a julio, como había propuesto el equipo de gobierno de la institución académica para adaptarse al calendario académico que impera en la mayor parte de la enseñanza superior europea. Para posicionarse sobre este asunto, el Consejo de Alumnos de la Universidad de Sevilla (Cadus) convocó el pasado jueves un pleno que, según uno de sus portavoces, Ángel Ruiz, ha sido uno de los más participativos de los últimos años. 

A dicha convocatoria acudieron 21 delegaciones de centros (en total, según el Cadus, son 25), por lo que el número de asistentes superó el medio centenar. Previamente, en las escuelas técnicas y facultades se organizaron asambleas para conocer el posicionamiento de los estudiantes sobre este asunto. En la mayoría de ellos la respuesta fue de rechazo al planteamiento del rectorado. 

La disconformidad quedó evidenciada en el pleno del Cadus, en el que se emitieron 14 votos en contra del adelanto de exámenes, dos abstenciones y sólo tres votos a favor. 

No obstante, y antes de la votación, se plantearon dos alternativas. Una fue la de votar sobre la propuesta del gobierno de la US (como finalmente se hizo) y otra la de aportar mejoras sobre este planteamiento. Entre dichas medidas se encuentran la de ampliar la separación entre la convocatoria ordinaria de junio y la de julio, de manera que en vez de contar sólo con dos semanas, dicho periodo llegara a tres. De esta manera, los universitarios tendrían más días de estudio para prepararse la convocatoria extraordinaria. 

La segunda medida contemplada es la del "refuerzo" de la evaluación continua, que ya se aplica en muchas asignaturas. Así, los conocimientos adquiridos por el estudiantado se comprobarían mediante prácticas, trabajos de investigación y exámenes de contenido más reducido, sin necesidad de que los alumnos acudan a las pruebas de la convocatoria. 

Todavía con asignaturas anuales

Uno de los motivos que ha provocado el rechazo al adelanto de exámenes es el hecho de que la Hispalense, al contrario de la mayoría de las universidades, aún cuenta en muchos de sus centros con asignaturas anuales y no semestrales, lo que dificulta que la convocatoria extraordinaria se celebre 15 días después de la ordinaria y en julio. No debe olvidarse que el temario de una asignatura anual (12 créditos) es mucho más amplio que el de una semestral (seis créditos), de ahí la necesidad de disponer de más tiempo para su preparación. 

Los representantes del Cadus, finalmente, votarán en contra de este adelanto -previsto para el curso 2022/23- en el próximo consejo de gobierno de la US, que se celebrará a finales de mes. Este cambio también supondría que las clases comenzaran antes, el lunes 12 de septiembre.