El asesor de Mercasevilla niega irregularidades en la venta del suelo

El vicesecretario del consejo de administración, Jorge Piñero, alega que no examinó el pliego de condiciones del concurso público mediante el que Sando se hizo con los terrenos del mercado central

Jorge Piñero, a la izquierda, acompañado por el decano del Colegio de Abogados, José Joaquín Gallardo
Jorge Piñero, a la izquierda, acompañado por el decano del Colegio de Abogados, José Joaquín Gallardo
Fernando Pérez Ávila / Sevilla

26 de septiembre 2009 - 05:03

El asesor jurídico de Mercasevilla, Jorge Piñero Gálvez, negó ayer que hayan existido irregularidades en la venta de los terrenos del mercado central de abastos a la empresa Sando y atribuyó a dos técnicos de la empresa municipal la inclusión de las dos cláusulas que posibilitaron que esta constructora ganara el concurso público para hacerse con el suelo de Mercasevilla. Además, explicó que el concurso fue supervisado por la empresa nacional Mercasa.

Piñero, vicesecretario del consejo de administración y de la comisión ejecutiva de Mercasevilla y vicedecano del Colegio de Abogados, declaró ayer durante tres horas ante la juez de Instrucción 6 de Sevilla, Mercedes Alaya, que coordina la investigación del caso de las comisiones ilegales de Mercasevilla y que imputa a Piñero los delitos de prevaricación, maquinación para alterar el precio de las cosas, fraude y exacción ilegales de funcionario público y un delito societario.

En su declaración, el imputado detalló que el ex director de Mercasevilla, Fernando Mellet, le encargó la elaboración del pliego de condiciones del concurso público de la venta de los suelos, pero que él le comentó que "no tenía conocimientos suficientes" de la parte administrativa. A esto, Mellet respondió "que no se preocupara" y "que iba a ser una técnico de la empresa, M. V. B., la que realizaría el borrador del pliego de condiciones en los aspectos administrativos".

Entre las condiciones del concurso figuran dos cláusulas que permitieron que fuera Sando -a través de su filial Sanma- quien se hiciera con los terrenos en febrero de 2006- y no la constructora Noga, que presentaba una oferta superior. Una de las cláusulas consiste en una limitación al alza que consideraba desproporcionadas las ofertas que excediesen del 10% de la media aritmética de todas las presentadas. La segunda de las condiciones polémicas primaba con hasta diez puntos la titularidad previa que se tuviera sobre los terrenos de Mercasevilla, que hacía a Sando partir con ventaja sobre las demás porque en julio de 2005 esta empresa había firmado un contrato de derecho de superficie con el mercado central de abastos.

En el acta de declaración de Piñero, al que ha tenido acceso este periódico, la juez expone que el asesor jurídico de Mercasevilla y el director de la entidad, Fernando Mellet, "resolvieron a sabiendas de su injusticia" un concurso "predeterminado que favoreciera claramente" a Sando. La oferta de esta constructora era de 106 millones, mientras que la de Noga ascendía a los 158. Por ello, la juez entiende que Piñero y Mellet crearon "artificios administrativos" para favorecer a Sando pese a que ésta presentaba "una oferta antieconómica y contraria al interés general".

Piñero, que quiso dejar claro que desde el 15 de septiembre se ha desligado de Mercasevilla, explicó que la limitación al alza está "amparada legalmente" y que "era la manera de asegurarse la compraventa futura dado que ya se estaban viendo los primeros síntomas de la burbuja inmobiliaria". Incluso explicó que la técnuico M. V. B le dijo que "era habitual en los concursos" y que el otro experto J. A. R. "no se opuso nunca a la misma".

Sobre la cláusula de titularidades previas, alegó que no la considera injusta porque el titular de cualquier derecho de ocupación sobre los terrenos merecía una compensación porque con el nuevo plan de ordenación urbana esos suelos iban a destinarse a uso residencial y se perderían así los derechos adquiridos. El asesor jurídico expuso que él no examinó el pliego de condiciones, que contó con el visto bueno de Mercasa, cuyos servicios jurídicos estaban encabezados por un abogado del Estado. A la salida del juzgado, Piñero señaló a la prensa que respondió a todo lo que le preguntaron y que, a su juicio, "no existe nada que se pueda considerar una irregularidad".

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