La calle Sierpes recupera el reloj de Casa Calvillo

En la mañana de este jueves se ha repuesto todo un símbolo de un paisaje urbano de la Sevilla más tradicional

El reloj de Casa Calvillo repuesto en su ubicación tradicional
El reloj de Casa Calvillo repuesto en su ubicación tradicional / M. G.

Luce de nuevo todo un símbolo de las conocidas como cuatro esquinas de la calle Sierpes: el reloj de Casa Calvillo. Hace dos años, poco antes del inicio de la pandemia, los viandantes advirtieron la ausencia del reloj, que se desmontó para poner a punto en un taller especializado. El reloj ha estado ingresado como los pacientes. Es el recuerdo de Casa Calvillo, el establecimiento que forma parte de la memoria de muchas generaciones, y gracias al cual los nazarenos de ruan miran la hora con disimulo cuando pasan por este tramo de la carrera oficial. La familia Calvillo ha cumplido su compromiso de cuidar y reponer unos de los grandes relojes de la ciudad.

Antonio Calvillo, el abuelo de José Antonio Calvillo, compró un edificio y abrió en 1932 en Sevilla el famoso bar Casa Calvillo, que funcionó hasta 1982, como se indica en el reloj ahora repuesto. Este edificio fue muy popular todos esos años y sigue siendo muy reconocido ahora, sobre todo porque está en la confluencia de la calle Sierpes con Jovellanos y Sagasta. Durante muchas Semanas Santas, los balcones de Casa Calvillo eran el lugar privilegiado para cantaores de saetas o para la recepción y atención de autoridades en Semana Santa. Las referencias a Casa Calvillo en artículos de prensa, libros o azulejos son muy habituales.

stats