La labor asistencial, hospitalaria y social, de la Orden de San Juan de Dios se remonta a la primera mitad del siglo XX. "Eran los años de la polio. Esta enfermedad que provocaba secuelas graves en niños, llevó a la Orden a inaugurar en 1949 un hospital en una parcela que entonces se situaba en el extrarradio de Sevilla -hoy Nervión- dedicado exclusivamente a atender a los niños de la polio. El hospital ocupaba un chalet que los hermanos San Juan de Dios compraron (1943) para comenzar a atender a niños afectados y a sus familias.

Este primer centro estaba dotado de grandes terrazas ya que el Sol formaba parte de la terapia frente a la polio", recuerda el hermano superior José Miguel Valdés. 

Estado de las obras del Sanatorio Nuestro Padre Jesús del Gran Poder en 1947.

La historia de un hospital emblemático

"Ante la ausencia de un sistema de salud público en aquel momento, la Orden sigue atendiendo con el mismo espíritu de su fundador, Juan de Dios, quien dedicó su vida a acoger, curar y cuidar de las personas más pobres y enfermas de Granada en un acto revolucionario de amor y de generosidad hacia los colectivos más desfavorecidos", explican fuentes de San Juan de Dios.

Dos años más tarde, los hermanos adquieren los terrenos anejos para la expansión del primitivo Sanatorio Nuestro Padre Jesús del Gran Poder, con su consecuente reforma integral y que será la base para el edificio actual. Tras 5 años de obra, en 1950 se inauguró el nuevo edificio, con capacidad para 150 camas.

Villa Amalia, primer edificio en el que los Hermanos de San Juan de Dios atienden a la población infantil en Nervión

La vacuna frenó la polio

Las campañas de vacunación frente a la polio hicieron desaparecer, progresivamente, el impacto de esta enfermedad; de manera similar a lo que ocurre con el Covid. "Pero los niños afectados sufrían graves secuelas de tipo traumatológico y ortopédico, de modo que la Orden San Juan de Dios se adaptó de nuevo para atender las nuevas necesidades y se centró en la asistencia de estos problemas", añade Valdés Grande. 

En la década de los sesenta, el centro irá adaptándose a las nuevas necesidades del entorno y acometiendo diversos proyectos de modernización y ampliación de estructuras y cartera de servicios de especialidades médico-quirúrgicas.

En 1989, el concierto firmado con el Servicio Andaluz de Salud permite la ampliación de la atención a enfermos de medicina interna, procedentes de los Hospitales Generales Virgen del Rocío y Macarena. Con estos ingresos se inicia la actividad de Cuidados Paliativos, una de las áreas en las que San Juan de Dios es referente en España al ser una de las instituciones pioneras en introducir y profesionalizar los cuidados en la etapa final de la vida.

Atención temprana

En 2009, el Hospital San Juan de Dios incorpora en su planta baja un Centro de Atención Infantil Temprana (CAIT) ante la creciente demanda de este tipo de dispositivos para evaluar y atender a niños de entre 0 y 6 años con problemas en el desarrollo o riesgo de padecerlos.

Trece años más tarde, el CAIT ha atendido a más de 2.000 niños y niñas de Sevilla y, bajo el mismo modelo de atención y valores de siempre, ha traspasado las paredes del Hospital para convertirse en un recurso periférico, contando con un segundo CAIT San Juan de Dios en Sevilla Este.

Nuevo hospital.

2022, el hospital inteligente

La apertura por fases del nuevo hospital inteligente se suma a como una nueva etapa histórica en este centro asistencial.

Las obras de cimentación del nuevo edificio, construido en los terrenos traseros del hospital original de Nervión, se inician en 2015, atravesando diferentes fases que concluirán en 2021.

El proyecto arquitectónico, firmado por Javier Jiménez Sanchez-Dalp, responde al encargo de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios de poner en marcha un gran centro sanitario y sociosanitario para Sevilla que permita ofrecer una atención a la persona en cualquier etapa de su vida a través del modelo holístico y humanizado que caracteriza a la institución.

"Las nuevas instalaciones están ideadas para adaptarse en caso de que se repitan situaciones como las que provocó la irrupción del Covid-19, de modo que determinadas salas puede convertirse en hospital Covid", explica Miguel Sánchez-Dalp, director médico.