"El dolor crónico no es un síntoma, es una enfermedad". Son palabras del presidente de la Sociedad Española Multidisciplinar del Dolor (Semdor), Luis Miguel Torres, que desde este jueves y hasta el próximo sábado reúne en Sevilla a casi 500 expertos en el tratamiento de esta dolencia en su III Congreso, con la participación de especialistas de todo el mundo. Y los datos que maneja hablan por sí solos.

Según una encuesta nacional, a raíz de la pandemia del Covid, la sociedad española ha pasado de contar con un 19% de personas que tienen dolor a un 25%. Aún así, el también jefe de Anestesiología y Tratamiento del Dolor del Hospital Puerta del Mar de Cádiz, reconoce que "no hay ningún dolor ante el que no se pueda hacer nada para aliviarlo".

Un enfoque global

En este marco, la cita anual de esta sociedad científica aborda durante estos días las principales novedades en cuanto a tratamientos del dolor, así como avances y retos a afrontar desde un "enfoque global". "Totalmente distinto a lo que hemos visto hasta ahora porque contamos con sesiones teóricas y prácticas dirigidas a todas las especialidades sanitarias relacionadas con el dolor, tanto médicas como farmacéuticas, de psicología, enfermería y fisioterapia", explica el especialista. 

El dolor es una señal de alerta, la forma que tiene nuestro sistema nervioso de avisar que ha habido una lesión o alguna parte de nuestro cuerpo no funciona como debería. Es pasajero y lo experimentamos a menudo. Sin embargo, a veces ocurre que hay dolor sin haber lesión, sin que nada vaya mal. Y ese es el conocido como dolor crónico, el cual, en palabras del doctor, "se convierte en un problema global en la forma de vivir".

"La calidad de vida baja mucho con el dolor crónico. Hay enfermedades crónicas con las que se puede hacer vida normal con ciertos cuidados especiales, pero con dolor crónico la vida social, familiar y, también laboral, se retrae mucho. El dolor se convierte en un problema global en el estilo de vida y eso es algo que no le pasa a ninguna otra enfermedad. Por eso necesitamos más medios y más importantes de los que tenemos ahora mismo para afrontarlo", admite.

La mitad de las consultas

Según el presidente de la Semdor, "la mitad de los pacientes que acuden a cualquier consulta médica lo hace por dolor". "Es evidente que estamos ante un problema global importantísimo de salud, que afecta sobremanera a la calidad de vida y, también, a la economía por el coste que suponen las bajas laborales por esta dolencia", apostilla. Con este panorama, Luis Miguel Torres afirma que "el dolor crónico siempre tiene alivio". "Hay cuadros de dolor crónico que no tienen cura, pero siempre tienen un alivio si se mantiene un tratamiento de forma adecuada con las técnicas y los fármacos que tenemos hoy en día", concreta el profesional.

Para ello destaca la medicina personalizada y multimodal, así como el uso de radiofrecuencia o tratamientos con láser y neuromodulación, pero también se está avanzando en el campo de la medicina regenerativa, con tratamientos con células madre. "Hay bastante inversión e investigación en tecnología de nuevos tratamientos que están dando con nuevos mecanismos y formas de tratar el dolor de manera más acelerad", concluye el presidente de la Semdor.