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El efecto Dalila, Sharon Stone y las minas de Salomón

  • Promoción. A las dos actrices que protagonizaron las dos versiones de 'Las minas del rey Salomón' les ha unido la fascinación por la ciudad

El efecto Dalila, Sharon Stone y las minas de Salomón

El efecto Dalila, Sharon Stone y las minas de Salomón

Sevilla no pudo hallar mejor embajadora para su promoción internacional. Sharon Stone cayó ante los embrujos de la ciudad. Se convirtió en una espontánea reportera y documentalista que desde la terraza del hotel Alfonso XIII mostró a todo el mundo con su cámara y su voz entregada las delicias de la ciudad.

En el subsuelo sentimental de Sevilla ha encontrado las minas del rey Salomón. A las dos actrices que protagonizaron las versiones cinematográficas de la novela de H. Rider Haggard, Deborah Kerr y Sharon Stone, les unió la fascinación por esta ciudad. Este año se ha conmemorado el centenario del nacimiento de la actriz británica Deborah Kerr. En 1950, el año del gol de Zarra en Maracaná retransmitido por Matías Prats, encarnó a la protagonista femenina en una mítica película en la que el explorador Allan Quatermain era interpretado por Stewart Granger.

Icono en la Sevilla del 29, en el 92 Sharon Stone fue mito erótico con 'Instinto básico'

En estos días en los que se cumplen los 150 años del encuentro de Stanley con Livingstone es provechoso recordar esas imágenes, aunque pequen de cierto colonialismo anacrónico. Deborah Kerr, actriz de muchísimos registros, se prodigó en sus visitas a Sevilla. Dicen que era asidua a jugar al frontón en la pista de Errauskin cerca de la ronda del Tamarguillo.

Sharon Stone nació en 1958. En el año capicúa, 1985, protagoniza una nueva versión de Las minas del rey Salomón, en esta ocasión compartiendo cartelera con Richard Chamberlain, el televisivo y sacerdotal Pájaro Espino. Una película de J. Lee Thompson con toda la estética aventurera de Indiana Jones o Tras el corazón verde. La actriz tenía entonces 27 años. Vi la película en el Ideal, el cine de verano de la Alameda cuya pantalla forma parte de la residencia para sacerdotes de la calle Becas. El legado del Pájaro Espino.

En 1992 Sharon Stone protagonizó Instinto Básico. Su cruce de piernas en la película de Paul Verhoeven se fosilizó icónicamente como los zapatos de Aznar en la mesa de las Azores o la caída de Fidel Castro bajando de un avión. La protagonizó con el actor Michel Douglas, hijo de Espartaco, nieto del Trapero, a quien tuve ocasión de saludar el mismo año 1992 cuando compartía con su entonces esposa, la mallorquina Diandra, una mesa en el restaurante de La Dorada junto al Pabellón de la Navegación. Cosecha cinematográfica del 92, Sharon Stone tiene en la actualidad 63 años y se conserva infinitamente mejor que la mayoría de pabellones de la Expo 92, el año que Ronald Koeman le dio en Wembley la primera Copa de Europa al Barcelona.

Sharon Stone ha sido la más fotografiada en la gala de la revista Elle en la Plaza de España, el recinto de la Exposición de 1929. En una de esas imágenes aparecía escoltada por los béticos Bartra y Joaquín. Es como la película de Billy Wilder: Un, dos… tres. Una actriz, dos futbolistas, tres goles del Atlético de Madrid, primera vez que los encaja el Betis en lo que va de Liga. ¿No llevará Sharon Stone el estigma de Dalila que ha mermado los atributos de Sansón? El Betis se quedó sin peluquero cuando Melado dejó de ser su speaker y ahora sus cabellos son más vulnerables. A Sansón en el cine lo encarnó el ínclito Victor Mature.

La imagen de Sharon Stone con los dos futbolistas y sus imágenes desde el hotel de Alfonso XIII me retrotraen a otra visita mediática y su testimonio gráfico. Ninguno de los cuatro jugó en el Betis, pero los cuatro nos fotografiamos con Bo Derek en una suite del hotel Alfonso XIII cuando vino a Sevilla para rodar Bolero. La acompañaba John Derek, su esposo, que habría sido un Quatermain mucho más convincente ya que fue uno de los que interpretaron a Tarzán. Allí estábamos escoltándola Javier de Pablo, Alejandro Hernández, Manuel Pedraz y este cronista.

El domingo hay derbi en Heliópolis y el sevillismo debería tratar de repetir el síndrome de Dalila para que el Sansón verdiblanco se viera en un trance. Sharon Stone se fue a la selva en busca de las minas del rey Salomón el año que Gordillo fichó por el Madrid. En el Tardón, entre López de Gómara y San Jacinto, hay un bar estupendo, el Salomón, especialista en pinchitos. Unos profesionales que vinieron de Melilla y encontraron una mina.

Como Deborah Kerr, seguro que Sharon Stone repite su visita a Sevilla. El frontón ya no existe, el periódico cercano, El Correo de Andalucía, es ahora un tanatorio, pero uno de los que lo dirigió, el padre José María Javierre, da nombre a la calle que une Los Arcos con la ronda del Tamarguillo. En Capitanía, Joaquín y Bartra, que todavía tendrá pesadillas con la única vez que se le ha visto correr a Gareth Bale en un campo de fútbol, se sentirían figurantes de Lawrence de Arabia o de El viento y el león.

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