Los delitos informáticos, y en concreto las estafas, han experimentado un enorme crecimiento en los últimos años. La pandemia del covid-19 ha acelerado el auge del cibercrimen, pues ha impulsado el uso del teléfono móvil y otras tecnologías de la información para hacer cualquier gestión. El Ministerio del Interior incluye ahora por primera vez las estadísticas de cibercriminalidad en los balances habituales que hace sobre la delincuencia, y que publica cada tres meses.

El pasado fin de semana, el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska, hizo público el balance completo de criminalidad del año 2022. Se trata de un ejercicio con una fuerte subida de prácticamente todos los delitos en la provincia de Sevilla, de casi el 23% en relación con el año anterior y del 8% si se compara con 2019, último año antes de la pandemia. La subida fue mucho mayor en el capítulo cibernético, donde los delitos informáticos subieron un 41% entre 2021 y 2022 y más de un 104% entre 2019 y 2022.

En la provincia sevillana se denunciaron el año pasado 14.575 delitos cometidos por medios cibernéticos. El ejercicio anterior cerró con 10.357, mientras que en 2019 esa cifra fue de 7.134. De los casi 15.000 casos denunciados, la gran mayoría son estafas, 12.835, que crecieron un 49% entre un año y otro y un 125% en los últimos tres ejercicios. Es decir, cada día se denuncian una media de más de 35 estafas informáticas en la provincia de Sevilla. 

Más de la mitad de los delitos informáticos se registraron en Sevilla capital, donde se denunciaron 7.511 casos. El año anterior fueron 5.324 y en 2019 se quedaron en 3.934. Es decir, un 41% que en 2021 y un 91% más que en el último año prepandemia. 

El informe de Interior apunta como clave para explicar este aumento de las ciberestafas "la penetración y el uso de internet en España (especialmente ligado a las crecientes formas de comercio y compras on line) que se viene observando desde hace ya algunos años, y de manera muy significativa desde 2016".

El Ministerio destaca que durante los años 2020 y 2021 se produjo un importante descenso de la criminalidad en España, "como consecuencia de las condiciones derivadas de la pandemia causada por el covid-19". Por ello, ha optado por incluir como referencia los datos de 2019.

A pesar del incremento de la ciberdelincuencia, la criminalidad convencional sigue siendo la más habitual. Así, el total de delitos registrados en Sevilla capital a lo largo de 2022 fue de 49.234, de los que 7.511 fueron por internet y el resto convencionales. Es decir, el cibercrimen ocupa alrededor del 15% del total de los delitos, aunque se espera que esta proporción siga creciendo en los próximos años, dado el cada vez más extendido uso de los teléfonos móviles y sus aplicaciones. En la provincia el total de delitos fue de 94.217, de los que 14.575 fueron por internet. La proporción es muy similar a la de la capital.

El balance destaca también el aumento de los delitos contra la libertad sexual. En Sevilla capital se registraron 47 denuncias por violación, mientras que en 2021 hubo 13 y en 2019 otras 31. Es decir, crecieron un 261,5% entre 2021 y 2022 y un 51,6% entre 2019 y 2022. El resto de delitos sexuales (no se incluyen aquí los cometidos por medios telemáticos) también crecieron un 17,5%. En la provincia se denunciaron el año pasado 86 violaciones, por las 38 del ejercicio anterior y las 53 de 2019.

Interior apunta que este fuerte aumento continúa la tendencia iniciada a partir del año 2014. "Dicho incremento debe ponerse, en parte, en relación con las activas políticas de concienciación y de reducción de la tolerancia social y personal frente a este tipo de hechos delictivos, lo que se traduce en una mayor  disposición de las víctimas a denunciar los mismos y a poner sus casos en manos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, reduciendo de esta forma los niveles de infradenuncia que han podido y pueden existir en relación con estos tipos penales", dice el documento, que añade que la tasa de esclarecimiento de estos delitos está en torno al 80%.

En cuanto al resto de delitos, en Sevilla subieron prácticamente todos en 2022, que ha sido el año más violento de la historia reciente de la ciudad. La modalidad más extendida es la de los hurtos, que crecieron un 34% con 16.108 casos. Buena parte de este auge está relacionado directamente con la vuelta del turismo, pues son muchos los delincuentes que eligen entre sus víctimas a los turistas extranjeros en las zonas monumentales y comerciales de Sevilla.

Los homicidios y asesinatos consumados fueron cinco, igual que el año anterior, pero sí hubo 13 casos más en tentativa. También crecieron un 61% las lesiones y riñas tumultuarias. Hubo un secuestro más que el año anterior. Fueron cuatro en total. Los robos con violencia crecieron un 32%, mientras que los con fuerza en domicilios y comercios subieron un 7%. Las sustracciones de vehículos subieron un 4%. 

Mención especial merece el tráfico de drogas, que experimentan un descenso de un 15,6%. Es el único delito que baja en Sevilla. Es un fenómeno contrario al del resto del país, donde ha crecido un 14,4%. Para Interior, este aumento a nivel nacional está muy relacionado con la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en el marco de planes específicos, como el del Campo de Gibraltar, "dado que en este fenómeno delictivo se producen muy pocas denuncias". Por tanto, añade el informe, "en realidad, es un indicador de la actividad policial frente a este tipo de delitos".