Un fallo de motor dejó el viernes en tierra a los pasajeros de un vuelo entre Sevilla y Bilbao de la compañía Volotea. El vuelo V73529 tenía prevista su salida a las 17:15, aunque el incidente se produjo sobre las 17:35 al haber un pequeño retraso. La avería se produjo en la maniobra de despegue, cuando el avión estaba lleno y se disponía a partir.

Los pasajeros notaron un frenazo brusco y fueron desalojados del avión y trasladados de nuevo a la terminal, donde esperaron durante varias horas a que se solucionara la incidencia.

Sin embargo, los propios viajeros veían desde la terminal cómo se sacaban las maletas del avión y que no estaba siendo reparado. A los pasajeros les entregaron un bono de veinte euros para consumir en el aeropuerto y finalmente el vuelo se canceló.

Se les ofreció la posibilidad de salir en autobús hasta la capital vizcaína, si bien esta opción fue algo que muchos de los pasajeros rechazaron por tratarse de un trayecto muy largo por carretera. Muchos de los viajeros optaron por pasar la noche en Sevilla y volar ayer a Bilbao.