Tres personas resultaron ayer heridas en un accidente de tráfico ocurrido al mediodía en el túnel de la calle Arjona. El accidente fue muy aparatoso, ya que consistió en un choque frontal entre dos coches. Pese a ello, ninguna de las personas implicadas en el siniestro resultó herida grave y sólo sufrieron el conocido como latigazo cervical.

El siniestro ocurrió poco antes de la una y media de la tarde en la parte del paso subterráneo más próxima a Torneo. Colisionaron un taxi en el que viajaban el conductor y una cliente y un turismo Mercedes clase A cuya única ocupante era la conductora. La Policía Local está investigando el siniestro y sus causas para determinar cuál de los dos vehículos invadió el carril contrario y por qué motivo lo hizo.

El impacto entre ambos turismos -el taxi es un Peugeot 406- fue bastante fuerte y ambos vehículos quedaron con sus respectivas partes delanteras completamente dañadas. El taxi entraba en el túnel desde Torneo y se dirigía a Arjona, mientras que el Mercedes estaba ya saliendo del paso subterráneo y entrando en Torneo. Uno de los dos conductores invadió el carril contrario y ambos coches chocaron de frente. Tras la colisión, el Mercedes quedó atravesado en la vía y el taxi fue desplazado al carril más próximo al muro, pero sin que llegara a impactar con la pared del paso subterráneo.

Pese a que este tipo de siniestros es el que se suele saldar con lesiones más graves al tratarse de un impacto directo, en este caso las tres personas que se vieron implicadas en el accidente sufrieron las heridas leves típicas del propio golpe. Los tres fueron atendidos in situ por los servicios de emergencias sanitarias del 061 y los dos conductores fueron trasladados al hospital en una ambulancia, sobre todo por prevención.

El accidente obligó a cortar durante una media hora el túnel para limpiar la calzada y retirar los vehículos accidentados. Antes de las dos de la tarde, el tráfico fue reabierto, por lo que no se registraron atascos especialmente importantes tras el siniestro. El túnel de Arjona padece desde su construcción un defecto importante, ya que hace una ligera curva en mitad del paso subterráneo. Esto obliga al conductor a desplazar el coche lateralmente unos centímetros si se quiere seguir en el mismo carril por el que se entró en el túnel, de forma que un despiste puede provocar una salida del carril o incluso dejar atrapado contra el muro al vehículo que circule por la derecha.