La Asociación de Hosteleros de Sevilla y su Provincia ha realizado un balance positivo de la campaña de Navidad, finalizada el pasado lunes día 7 de enero, destacando un aumento generalizado del 10% en las ventas con respecto a la Navidad de 2017.

La proliferación de comidas navideñas, sumado al alto porcentaje de ocupación hotelera, ha propiciado el incremento de ventas con respecto al ejercicio anterior, destacando el puente de la Inmaculada, el puente del 31 de diciembre y el del 6 de enero como picos importantes de venta. Estos datos aproximativos han sido obtenidos de la puesta en común de los miembros de la patronal de hostelería que celebran este incremento estacional con respecto a años pasados.

A esto hay que añadir la ausencia de incidentes destacables durante estas fechas. El presidente de la Asociación de Hostelería, Antonio Luque, ha destacado, además, que “estas cifras llevan consigo la generación de puestos de trabajo en un sector crucial en Sevilla como es la hostelería”. A lo que hay que añadir que el turismo que ha visitado la ciudad es de mayor calidad: "En líneas generales, los fines de semana los negocios han tenido mucha afluencia y en los días entre semana se han aumentado las ventas con respecto a otros años en Navidad gracias a los turistas”, ha añadido el presidente de los hosteleros sevillanos. 

Espectáculo en la Plaza de San Francisco.

Cabe resaltar las buenas condiciones climáticas existentes durante estas fechas que, sumada a la oferta cultura y de ocio, han permitido que turistas y residentes hayan podido disfrutar de la gran oferta gastronómica de la capital y provincia. “El clima ha permitido que se hayan podido explotar las terrazas y veladores que supone una importante fuente de ingresos para bares y restaurantes”, ha matizado Luque.

Por su parte, la patronal de hostelería ha reiterado su compromiso y el de sus socios con el estricto cumplimiento de la legalidad, lo que ha permitido el buen desarrollo. A su vez, ha mostrado su preocupación por la competencia desleal en la que negocios sin licencia de hostelería, tales como abacerías, panaderías y tiendas de alimentación, entre otros negocios, que utilizan sus locales comerciales como bares desempeñando así una actividad distinta a la licitada.