Unicef alerta: "Urge un plan que luche contra la pobreza infantil que sitúe a los niños en el centro de las políticas públicas y de los presupuestos". Un 35% de los menores andaluces se encuentran en riesgo de exclusión social, según el Observatorio de la Infancia en Andalucía. Además, la Encuesta de Condiciones de Vida del Instituto Naciones de Estadística (INE), que recoge el informe de Unicef Infancia en Andalucía 2015, advierte que la andaluza es la tercera comunidad autónoma con mayor tasa de riesgo de pobreza o exclusión social infantil, por detrás de Ceuta y Murcia.

Juan Luis López Gívica, asesor del área de Menores y Educación de la Oficina del Defensor del Pueblo, el periodista Sebastián Talavera, la trabajadora social Noelia Calvo y el concejal de Salteras José Antonio Alfaro analizaron la situación esta semana en el III Foro Profesional por la Infancia en Andalucía, que contó con la participación del Colegio de Médicos de Sevilla, el Colegio de Educadores Sociales de Andalucía, el Colegio de Enfermería de Sevilla, la Fundación para la Formación y la Práctica de la Psicología (Funcop), el Colegio de Farmacéuticos de Sevilla, la Asociación de la Prensa de Sevilla, el Defensor del Menor de Andalucía y la Fundación Gota de Leche.

En cuanto a la inversión, el informe de Unicef destaca un descenso del presupuesto destinado a políticas de infancia en Andalucía en el periodo de 2010 a 2013, tras un repunte entre 2007 y 2013. Éste año la inversión en infancia se redujo un 14% respecto al 2010.

Desde el Ayuntamiento de Sevilla, por su parte, informan de que unos 1.500 menores se han beneficiado de las actuaciones llevadas a cabo este verano por el gobierno municipal, como las comidas a domicilio en Zonas de Transformación Social, el reparto de comida para los niños del asentamiento del Vacie y el suplemento alimenticio en las Escuelas de Verano. El presupuesto total fue de 150.000 euros, partida que salió de la delegación de Bienestar Social.

Según el Observatorio de la Infancia en Andalucía, el 8% de los niños menores de 16 años presentan carencias materiales y privación severa. "La pobreza genera vergüenza, además de posibles secuelas físicas, psicológicas y sociales en el menor", apunta José Antonio Alfaro, trabajador social y concejal en el Ayuntamiento de Salteras. Es en los adolescentes donde estas secuelas "se manifiesta con mayor gravedad a través del absentismo escolar, el consumo de estupefacientes o actitudes agresivas", apunta Gonzalo Cañestro, presidente del Colegio de Trabajadores Sociales de Sevilla.

Éste destaca también la presencia de un nuevo colectivo en riesgo de exclusión social. Se trata, según Cañestro, de "jóvenes de barrios acomodados que ni estudian ni trabajan y que no están sometidos al control de sus padres por motivos laborales; esto provoca niños incontrolados, pero no marginales."

Desde Unicef Comité Andalucía exigen que se adopten las medidas necesarias para corregir esta situación, ya que esto "sólo podrá traer en un futuro cercano una sociedad más desigual".