El kurdo que tiró el zapato a Erdogan dice que el bar denunciado ya no es suyo

Hokman Joma, el refugiado sirio de origen kurdo que arrojó un zapato al actual presidente de Turquía, Recep Tayip Erdogan, ha asegurado que el bar El Zapatazo ya no es de su propiedad. El local, ubicado en la calle Peris Mencheta, fue denunciado y desalojado este fin de semana por la Policía Local de Sevilla por no cumplir con las condiciones establecidas en su licencia.

Joma ha explicado a este periódico que ha traspasado el local a un compatriota suyo, que es su amigo y que ha mantenido el nombre del bar, una referencia al gesto de protesta que Joma protagonizó en el año 2010 durante una visita de Erdogan a Sevilla. Joma arrojó un zapato al entonces primer ministro turco, en lo que se considera uno de los mayores insultos en el mundo árabe.

Por aquel incidente cumplió casi tres años de prisión. Al salir de la cárcel fundó El Zapatazo, un bar especializado en kebabs, que ha regentado durante años. Después lo traspasó y ha montado otros dos restaurantes en la misma zona. Por tanto, Joma ha querido aclarar que no ha sido un bar de su propiedad el que ha sido denunciado por la Policía Local, sino su antiguo negocio.