El Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 3 de Sevilla, en funciones de guardia, ha decretado este miércoles la puesta en libertad para el hombre detenido por amenazar a su pareja en San Juan de Aznalfarache, después de que la víctima no ratificara su denuncia y se negara a declarar. Así lo han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

La juez, de oficio y a petición del Ministerio Fiscal, ha acordado imponer una orden de alejamiento para el detenido, que no podrá acercarse a menos de 300 metros de la víctima ni comunicarse con ella por ningún medio. El hombre está siendo investigado por un delito de lesiones y otro de amenazas con instrumento peligroso.

El hombre, de 30 años, fue detenido la noche del martes por la Policía Nacional, después de que agrediera y amenazara a su pareja, y de que en el registro de su vivienda se hallaran dos armas de fuego, un arco de tiro olímpico y una prenda del uniforme de la Policía.

Se trata de un delincuente que tiene 19 antecedentes por distintos delitos, la mayoría por robos y también cuenta con detenciones por violencia machista. 

Una de las armas intervenidas al detenido.

Los hechos comenzaron en la mañana del pasado domingo, cuando la víctima se citó con su pareja, y en transcurso del encuentro tuvo lugar una discusión en la que la mujer resultó agredida, según ha informado este miércoles la Policía Nacional. Posteriormente, la madre de la víctima recibió dos llamadas de teléfono amenazando a su hija de muerte, por lo que decidió acudir a la comisaría para presentar una denuncia.

Su hija y víctima, de 32 años, se presentó el martes en las mismas dependencias y expuso ante los agentes que ha convivido con su ex pareja durante diez años, y que tienen tres hijos en común. Les relató diversos episodios anteriores en los que fue agredida y amenazada de muerte, llegando en una ocasión a encañonarla con un arma de fuego larga, que ella describió como una "metralleta". También dijo que anteriormente lo había denunciado por malos tratos, y alegó que disponía de una orden de alejamiento que era quebrantada por su ex pareja.

Las armas y la camisa de la Policía requisadas.

En el transcurso de la misma mañana se atendió una llamada por una discusión en la vía pública entre dos varones en las que se proferían amenazas de muerte, pero a la llegada de los agentes, solo se encontraba en el lugar un de los implicados, resultando ser la persona que estaba siendo denunciada en ese momento por violencia de género, por lo que se procedió a su detención como presunto autor de un delito de amenazas con arma de fuego.

El arrestado declaró voluntariamente a los agentes que poseía dos armas de fuego que había adquirido ilegalmente y accedió a entregarlas, y mientras se realizaba la búsqueda en su domicilio, un familiar que convive con él se opuso al mismo, por lo que se paralizó y solicitó la correspondiente orden judicial.

Una vez obtenida se inició nuevamente el registro, localizándose en una de sus viviendas un arma larga tipo subfusil, un revolver, munición, un arco de tiro olímpico y una prenda de la uniformidad oficial de Policía Nacional.