Los libros en el centro del discurso

Es difícil, por no decir improbable, que en alguna biblioteca públicas o privada de este país no haya al menos un título publicado por el Grupo Planeta a través de su centenar de sellos diversos. Esa vocación cultural y global es la que ha favorecido que esta empresa lidere actualmente el mercado del libro español e hispanoamericano y que su presidente, José Manuel Lara Bosch, como recordaron la noche del jueves los miembros del jurado del II Premio Manuel Clavero, sea el segundo magnate editorial en Francia y el sexto en todo el mundo. Pero no menos sorprendente es que detrás de ese impecable ejercicio económico haya un editor vocacional que conoce por su nombre a los autores de un catálogo abrumador. Ayer, en una visita a las instalaciones de Diario de Sevilla, Lara Bosch glosó con admiración los méritos de Jesús Carrasco, extremeño afincado en Sevilla cuyo debut literario -Intemperie- ha encontrado acomodo en su prestigioso sello Seix Barral. "Está teniendo una acogida entusiasta en las mejores editoriales extranjeras y 13 países han contratado ya la traducción. Lo mismo nos ha ocurrido con la novela policíaca de Dolores Redondo [El guardián invisible] que hemos publicado en Destino", explicaba el dueño de Planeta, corroborando así que el hecho de presidir uno de los mayores grupos europeos de comunicación no le impide cultivar su afición por la lectura y su olfato para los nuevos talentos.

Esa vocación literaria se concreta igualmente en la actividad que desarrolla desde Andalucía la Fundación José Manuel Lara. Su directora, la periodista y editora Ana Gavín, acudió a la velada del Alfonso XIII recién llegada de Madrid, donde la Fundación presentó el nuevo título de su colección Vandalia de poesía, La musa furtiva, que recopila la obra lírica de Vicente Molina Foix. Otros rostros conocidos de la vida cultural andaluza se dieron cita en la entrega del galardón. Académicos y miembros de la comunidad universitaria, como la americanista Enriqueta Vila, el rector de la Hispalense Antonio Ramírez de Arellano, el bioquímico Miguel Ángel de la Rosa, la presidenta de la Academia de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría Isabel de León, la directora de los museos cordobeses Mercedes Valverde, la mecenas flamenca Cristina Heeren o los periodistas Antonio Burgos, Carlos Colón, Charo Fernández-Cotta, José Joaquín León, Antonio Yélamo, Carmen Carballo y Nicolás Salas.

El perfil empresarial del galardonado atrajo a la cita también a economistas y personalidades del mundo de las finanzas y los negocios, como Braulio Medel, Santiago Herrero, Fernando Faces, Francisco Ferraro, Javier Benjumea y José Luis Berrendero, entre otros. Por supuesto, no faltaron fieles amigos del galardonado, como el diestro Curro Romero, su esposa Carmen Tello y el periodista Enrique de Miguel. O como el alcalde de El Pedroso, Manuel Meléndez, la localidad de la Sierra Norte de Sevilla de donde procede su familia paterna, de la que es Marqués y donde Lara Bosch quiere empadronarse, decidido, según declaró, a retomar en esta etapa sus raíces y reconquistar desde la madurez aquellos paisajes luminosos de los veranos de su infancia que tanto contrastaban, recordó, con la Barcelona gris de los años 50.