La mujer que fue condenada por acusar falsamente de malos tratos a su ex marido volvió este martes a insistir en que éste la golpeó. Pese a que los médicos que la examinaron no apreciaron lesiones compatibles con su versión, y que varios testigos señalaron que el ex marido se encontraba en el momento de la supuesta agresión en su casa de Umbrete, la mujer asegura que éste la tiró al suelo y la arrastró. Así lo sostuvo en el juicio por denuncia falsa en el que compareció como acusada, celebrado este martes en el juzgado de lo Penal 14 de Sevilla, después de que se suspendiera hasta en dos ocasiones anteriores.

La mujer, identificada como Raquel V. B., fue condenada a 20 meses de cárcel en el año 2012, después de que una serie de denuncias falsas contra su ex marido llevaran a éste, José Antonio Santos, a pasar once meses en prisión. Tras esta condena, Raquel V. B. volvió a denunciar una supuesta agresión de su ex pareja, que fue archivada primero por el juzgado de Violencia sobre la Mujer y después por la Audiencia de Sevilla. Este martes fue enjuiciada por denuncia falsa y falso testimonio, junto con un testigo que supuestamente la socorrió y al que se le imputan los mismos delitos.

Según la versión de la acusada, el ex marido la habría golpeado sobre las diez de la noche en la plaza de Azahín, en el Parque Alcosa. A esa hora, dos vecinos y dos albañiles situaron a José Antonio Santos haciendo unas reformas en su casa de Umbrete. Los albañiles aseguraron que lo dejaron limpiando una hormigonera y recogiendo herramientas entre las nueve y media y las diez menos cuarto de la noche, mientras que los vecinos sostuvieron que José Antonio estuvo en su casa a las diez y media. Para el fiscal, es "imposible" que este hombre pudiera ir desde Umbrete hasta el Parque Alcosa, agredir a su ex mujer y luego volver a Umbrete en una media hora.

Raquel V. B. fue llevada a Urgencias por un testigo, dueño de un bar de Alcosa que la conocía porque era cliente de su establecimiento, que la vio tirada en el suelo y la socorrió. Este testigo también está acusado de denuncia falsa, puesto que en sus primeras declaraciones aseguró que vio al ex marido de la víctima y dio la matrícula y el color de su coche. Este martes, en cambio, admitió que no vio a nadie y que dijo la matrícula que le había indicado Raquel V. B., y que lo hizo porque creía que estaba ayudando a una víctima de la violencia de género.

Dos médicos que atendieron a la mujer en el hospital también desmontaron su versión de los hechos. Las facultativas ratificaron que no había relación de causalidad entre las lesiones que presentaba y su relato de la agresión. No observaron ninguna de las lesiones que manifestaba la acusada, como golpes y patadas en la barriga, espalda y cabeza.

Raquel V. B., por su parte, aseguró que no recuerda en qué coche huyó su ex marido y que denunció porque la instó el hombre que la llevó al hospital. "Yo no quería denunciar, pero lo hice porque cuando salí del hospital él me convenció", dijo la mujer, en referencia al otro imputado.

Al término de la vista, la Fiscalía rebajó su petición para Raquel V. B. al pago de una multa de 4.050 euros. Inicialmente solicitaba 18 meses de cárcel y una multa de 7.560 euros por sendos delitos de denuncia falsa y testimonio. Para el segundo imputado pide una multa de 540 euros, frente al año y medio de prisión que pedía inicialmente, ya que entiende que no mintió sino que alteró la verdad de los hechos.

Una "venganza" por una denuncia anterior

El ex marido de Raquel V. B., José Antonio Santos, aseguró en el juicio que la acusación de su ex mujer responde a una "venganza" por una denuncia anterior, que él interpuso porque ella incumplió el régimen de visitas del hijo que tienen en común. Santos manifestó también que la imputada le puso otra denuncia el año pasado. Tras el juicio, el ex marido de Raquel V. B. explicó a los periodistas que sólo quiere que su ex mujer le deje tranquilo y que la castiguen, porque con tantas denuncias falsas, además de perjudicarle a él, "hace mucho daño a las mujeres que de verdad son maltratadas". Su abogado, Fernando Retamar ha solicitado dos años de cárcel para Raquel V. B. y uno para el otro imputado. Para el letrado, los dos acusados elaboraron un "montaje, una confabulación para mentir y simular los hechos". El otro imputado hizo derecho de su última palabra y "pidió disculpas si ha podido perjudicar a alguien". "La ayudé por el tema del maltrato a la mujer", dijo.