El convento de Madre de Dios de la Piedad ha recuperado parte de su patrimonio gracias a la generosidad de la Fundación Casa Ducal de Medinaceli y al buen hacer de la Fundación Factum Arte, empresa líder en la reproducción digital de obras de arte. El pasado martes fueron depositadas en el presbiterio de la iglesia del convento las réplicas de las esculturas orantes de doña Juana de Zúñiga y Catalina Cortés, esposa e hija respectivamente del conquistador Hernán Cortés, cuyos originales se encuentran en el claustrillo del monasterio de la Cartuja de Santa María de las Cuevas, frente a la maravillosa capilla de los Enríquez de Ribera. Realizadas por Diego de Pesquera en 1575, no hay constancia documental de que llegasen a ubicarse en el lugar para el que fueron concebidas.

Acto de recepción de las esculturas.

El acto, presidido por las madres Sor Patricia y Sor Adela, contó con la intervención de Juan Manuel Albendea, director general de la Fundación Medinaceli, que contextualizó las esculturas con una interesante documentación de archivo de la Casa Ducal, cuyos facsímiles también han sido cedidos. A continuación, desde Factum Arte, se resumió todo el proceso de realización de las réplicas, para terminar Amidea Navarro, delegada de Patrimonio de la casa consistorial, expresó la voluntad del Ayuntamiento de Sevilla de preservar estos auténticos tesoros de que dispone Sevilla, como son los conventos de clausura.

De este modo, después de casi 450 años, las estatuas orantes podrán acompañar a las yacentes de ambos personajes, obras realizadas en 1590 por Juan de Oviedo y Miguel Adán, embelleciendo aún más el magnífico presbiterio del Convento de Madre de Dios