La última reunión mantenida la semana pasada entre responsables de la Gerencia Municipal de Urbanismo y la multinacional Ikea ha sido muy satisfactoria. Los informes sectoriales previos a la aprobación del Plan Parcial que dará cobertura urbanística a la operación y que permitirá iniciar las obras se han resuelto de manera favorable, según confirmaron fuentes municipales.

En concreto, el gobierno local se comprometió el año pasado a solicitar una serie de informes sectoriales a la Dirección General de Carreteras de la Junta, a la Demarcación de Carreteras del Estado, a la Consejería de Fomento y Vivienda y a la de Turismo y Comercio, y también a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir. Y el trámite avanza de forma positiva. La aprobación definitiva del Plan Parcial está condicionada a que la compañía suministradora de electricidad garantice la dotación, la redacción previa del proyecto de construcción de la SE-35 -en el tramo comprendido entre la Avenida Emilio Lemos y la carretera que une Brenes con Sevilla- y la autorización de la Dirección General de Infraestructuras Ferroviarias.

Fuentes municipales insisten en que el proyecto para abrir una segunda tienda en Sevilla está pendiente, básicamente, del deslinde de una vía pecuaria que cruza los terrenos de San Nicolás, en concreto, la Cañada Real de Poco Aceite. El Ayuntamiento debe cumplir con la legislación vigente en lo que se refiere al deslinde, desafectación y, en su caso, compensación de las vías pecuarias que discurren por esta zona próxima al aeropuerto. Y este proceso administrativo es el que mantiene enmarañado el asunto. El trámite debe iniciarlo el gobierno local y, posteriormente, es la Junta quien debe validarlo.

Por lo demás, según fuentes de Urbanismo, la vía está despejada y las previsiones municipales es que la primera piedra del centro comercial se ponga antes de que concluya el mandato. Pero para eso quedan todavía dos años, lo que evidencia que el proceso será lento.

En los próximos meses, quizás en primavera, es probable que el Plan Parcial esté listo para su aprobación definitiva y sobre esa fecha puede que se exponga al público el proyecto de la carretera SE-35, vital para el proyecto de Ikea. El Estado liberó el año pasado 12,5 millones de euros para ese tramo que conectará con el nuevo Ikea, a cambio de que el Ayuntamiento asuma como contraprestación el mantenimiento de varias carreteras. La licitación debe realizarse en breve, según la información que manejan los populares.

Todo esto lleva a pensar que las obras de reurbanización en las parcelas empezarán este año, coincidiendo con los movimientos de tierra de la autovía.

El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, señaló hace ahora un año que la segunda tienda de Ikea, que prevé crear 7.000 puestos de trabajo, abriría en otoño de 2014. Un plazo que a día de hoy es totalmente imposible.