Los relojes de Sevilla pasan por chapa y pintura

Más de una treintena de relojes de propiedad municipal pasarán por chapa y pintura para preservar su correcto funcionamiento. Lo cierto es que diferentes edificios públicos cuentan con piezas de distintas épocas, que incluso podrían entrar dentro de la categoría de joya de relojería. Objetos clásicos que forman parte del patrimonio de la capital y cuyo mantenimiento es esencial. El Ayuntamiento ha sacado a licitación los trabajos de conservación, cuyo presupuesto alcanzará los 115.411,76 euros y el plazo de ejecución será de 24 meses.

Los hay de diferentes tipos, pero los más numerosos se encuentran en el interior de la propia Casa Consistorial. Como un reloj de antesala inglés con mecanismo de carrillón, datado en el siglo XIX, que se encuentra en la Sala San Fernando y el de sobremesa con figura de caballo alado en el Salón Colón. Pero también los de hay de torre. Algunos de los más visibles -y reconocibles por los sevillanos- están en el Puente de Triana, junto plaza del Altozano, en el Cementerio de San Fernando y en el pilar inclinado de la Alameda de Hércules. En definitiva, piezas que necesitan una empresa o profesional habilitado y especializado en sistemas de relojería para realizar las manipulaciones necesarias para mantener la hora oficial actualizada y las funciones coyunturales requeridas, tales como las campanadas de fin de año u otras que pudieran plantearse.

Entre las funciones para el mantenimiento y conservación de los relojes, el pliego detalla que, como mínimo, será necesario:

• Revisar semanalmente todos los relojes de torre.
• Dar cuerda cada cuatro días a todos los relojes de torre.
• Dar cuerda cada cinco días a todos los relojes de oficinas y despachos.
• Limpieza mensual con producto adecuado de todos los relojes de torre, desmontando las piezas necesarias para ello y cambio de aceite de Vis-Sin fin en los relojes de remontaje eléctrico (Plaza Nueva, Ortiz de Zúñiga y Cementerio).
• Revisión dos veces a la semana de los relojes de oficina en Plaza Nueva, haciendo hincapié en la Alcaldía.
• Llevar a cabo las modificaciones a realizar al objeto del cumplimiento de la Ordenanza Municipal de ruido.
• Cambiar la hora en el último domingo de marzo y octubre, haciendo el cambio de Plaza Nueva a partir de las doce de la noche. En los demás edificios y oficinas se harían adecuándose a los horarios de apertura de estos.
• Verificar y comprobar el reloj de Plaza Nueva para las campanadas de Año Nuevo, garantizando su funcionamiento en ese servicio.

El grupo más numeroso son los 14 que están dentro del Ayuntamiento. La mayoría son del siglo XIX, pero también destaca un reloj de antesala inglés, con maquinaria carrillón, en la Sala San Fernando. También destacan los de torre. El pliego incluye el que se encuentra en el propio Consistorio, en la Hemeroteca Municipal, en el Cementerio de San Fernando, en el colegio Ortiz de Zúñiga, en el centro educativo Carmen Benítez, en las parroquias de la Concepción y San Lorenzo, en el Puente de Triana y en la entrada de la Real Fábrica de Artillería. Otros relojes de la ciudad se ubican en la Estación de Autobuses del Prado de San Sebastián, en el Patio de la Buhaira, en San Isidoro y en el pilar inclinado de la Alameda.